Aprueban plan de ayuda para New Jersey de desastre
El Departamento de Vivienda y Desarrollo Urbano de Estados Unidos anunció la aprobación del plan de recuperación de desastres del Estado de Nueva Jersey, que suma $15.6 millones en asistencia de emergencia para ayudar a comunidades a través de Nueva Jersey; específicamente el Condado de Passaic; a recuperarse del Huracán Irene. Con la aceptación de este plan de desastre, la labor real de la recuperación a largo plazo de los desastres puede comenzar en Nueva Jersey.
Estos subsidios, otorgados a través del programa ‘Community Development Block Grant (CDBG) Program’ o Programa de Subsidios para el Desarrollo Comunitario, ofrecerán apoyo a largo plazo a los esfuerzos de las comunidades locales devastadas por los desastres ocurridos el año pasado.
“Ahora que estos planes han sido aprobados, es hora de comenzar a reconstruir la vivienda y la infraestructura dañada por las terrible tormentas del año pasado,” dijo Mirza Orriols, subdirectora regional interina del Departamento de Vivienda. “Nueva Jersey, especialmente el Condado de Passaic, ahora podrá comenzar a devolver la normalidad a sus vecindarios.”
El 18 de noviembre del 2011, el Congreso otorgo $300 millones en fondos CDBG para apoyar la recuperación a largo plazo de desastres a través de la nación. A la misma vez, el Congreso le dio a HUD la autoridad de asignar hasta $100 millones en fondos CDBG para asistir a “las aéreas mas impactadas” tras los desastres del año pasado. El secretario de HUD Shaun Donovan decidió ejercer la autoridad de HUD, destinando el monto total de los fondos CDBG permitidos para ayudar a estos estados y áreas locales.
El propósito de estos fondos es llenar las necesidades existentes de vivienda, negocios, e infraestructura que no han sido atendidas por otras formas de asistencia pública o privada. Utilizando una combinación de datos federales de la Agencia de Manejo de Emergencias (FEMA) y la Administración de Pequeños Negocios (SBA), HUD identifico esos estados y comunidades locales mas impactadas y que requerían la mayor asistencia para recuperarse debido a los devastadores tornados en el sureste y Missouri; los remanentes de los huracanes Irene y Lee en el noroeste y Nueva Inglaterra, inundaciones severas en partes de Dakota del Norte; y destructivos incendios en Texas.