Aspirina puede prevenir un ataque cardiaco
Hay pruebas científicas que demuestran que una aspirina al día puede ayudar a prevenir un ataque cardiaco o un derrame cerebral, pero no en todas las personas, además de que puede tener efectos secundarios indeseables.
Según el Dr. Robert Temple, M.D., subdirector de Ciencias Clínicas de la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés), una cosa es segura: usted no debe seguir un tratamiento de aspirina diaria sin hablar primero con su profesional de la salud para que evalúe las ventajas y los riesgos.
“Desde los años 90, los datos clínicos han demostrado que una baja dosis diaria de aspirina puede ayudar a prevenir la recurrencia en las personas que han sufrido un infarto de miocardio o un derrame cerebral, o que padecen una enfermedad vascular del corazón”, informa el Dr. Temple (una dosis puede variar de los 80 miligramos de una tableta de dosis baja, hasta los 325 de una normal). Esto se conoce como “prevención secundaria”.
Sin embargo, después de analizar minuciosamente los datos científicos de estudios importantes, la FDA ha concluido que éstos no sustentan el uso de la aspirina como un medicamento preventivo para quienes no han sufrido un ataque cardiaco, un derrame cerebral o problemas cardiovasculares, un uso que se califica como de “prevención primaria”. Las ventajas para tales personas no se han establecido, pero los riesgos —tales como un sangrado peligroso en el cerebro o el estómago— no dejan de estar presentes, advierte el Dr. Temple.
Cuando uno sufre un infarto, es porque se ha formado un coágulo en una de las arterias coronarias (que suministran sangre al corazón) que obstruye el flujo de sangre y oxígeno hasta el corazón. La aspirina actúa interfiriendo con la capacidad coagulante de la sangre.
Hay que tener cuidado al tomar aspirina junto con otros anticoagulantes, tales como la warfarina, el dabigatrán (Pradaxa), el rivaroxabán (Xarelto) y el apixibán (Eliquis), previene el Dr. Temple.
¿Y qué hay de las personas que no han tenido problemas del corazón ni un derrame, pero que corren un mayor riesgo debido a sus antecedentes familiares o por presentar otros indicios de arteriopatías? ¿Representa una estrategia segura y eficaz para ellas tomar una aspirina al día?
De nuevo, recalca el Dr. Temple, los datos clínicos no indican que tenga ninguna ventaja para estas personas. Y añade que hay varios estudios clínicos de gran envergadura en marcha que siguen investigando el uso de la aspirina para la prevención primaria de los infartos o los derrames. La FDA está dando seguimiento a estos estudios y continuará analizando las pruebas que vayan surgiendo.
En resumidas cuentas, vale la pena que las personas que han sufrido un ataque cardiaco, un derrame cerebral o problemas cardiovasculares tomen en consideración la terapia de aspirina diaria. Y si está pensando recurrir a esta terapia, primero debe hablar con su profesional de la salud para tener una opinión informada, señala el Dr. Temple.
Por último, la cantidad de aspirina a ingerir es importante. Por su salud y su seguridad, es fundamental que la dosis y la frecuencia con la que la tome sean las correctas para usted. Su profesional de la salud puede decirle qué dosis y qué frecuencia serán las de más provecho, con el mínimo de efectos secundarios.
Si su profesional de la salud le recomienda tomar aspirina diariamente para reducir el riesgo de sufrir infartos y derrames a causa de coágulos, lea la etiqueta con detenimiento para asegurarse de adquirir el producto correcto. Algunos medicamentos combinan la aspirina con otros analgésicos o ingredientes, y no deben usarse para una terapia de largo plazo con aspirina.