Varios alcaldes en NJ se ponen del lado de los migrantes

Los alcaldes de ciudades con fuerte presencia hispana como Newark y Paterson han levantado su voz para defender a sus inmigrantes ante la incertidumbre sobre las políticas que aplicará el nuevo presidente de los Estados Unidos.

El primer pitazo lo dio Ras Baraka, alcalde de Newark, que el año pasado inició la entrega de ID municipal a los residentes locales.

“La ciudad de Newark tiene una política de proteger a los inmigrantes indocumentados de la deportación por las autoridades de inmigración de los Estados Unidos. A pesar de la elección de Donald Trump, no vemos ningún motivo para cambiar esa política,” dijo Baraka.

“Junto con Nueva York y Los Ángeles, no detenemos a presos indocumentados en la cárcel a petición del departamento de inmigración y aduana a menos que la solicitud de retención sea acompañada por una orden de juez” precisó el alcalde.

“Inmigrantes indocumentados que son arrestados por el departamento de policía de la ciudad de Newark por actividad criminal seguirán sujetos a la ley al igual que los presuntos delincuentes quienes son ciudadanos americanos”.

Aclaró que su despacho se mantiene en el estricto cumplimiento de las leyes federales.

“En la ciudad de Newark cumplimos con las agencias de inmigración federal, pero insistimos en que las solicitudes de retención sean manejadas constitucionalmente. Espero que ningún presidente viole estos principios, la base misma de nuestra nación, mediante la adopción de medidas punitivas contra las ciudades que están simplemente protegiendo el bienestar de los residentes.”

Por su parte el alcalde de Paterson, José Torres, de origen puertorriqueño, pidió al nuevo presidente, Donald Trump, que continúe con las ordenes ejecutivas como DACA y otros, expedidas por el presidente saliente Barack Obama.

“Los votantes y las ánforas han hablado. Como ciudadanos de esta gran Nación y respetuosos de las leyes, debemos de darle una oportunidad al nuevo Presidente electo, Donald Trump, y a su vez él debería comprometerse a trabajar con nosotros,” dice el alcalde Torres en un comunicado.

“Y como un signo de buena voluntad antes de empezar su mandato, debería asegurarnos que No eliminara la orden ejecutiva de inmigración del Presidente Obama, que afecta a más de 10 millones de personas”.

Manteniendo la orden ejecutiva del Presidente Obama sería una buena medida para fortalecer nuestra democracia.

Tampoco se asusta con las deportaciones siempre y cuando estas sean justas.

“ En el plan de reforma inmigratoria del Presidente Obama, más que cualquier anterior Presidente, ya se han deportado a miles de personas que habían violado las leyes migratorias y no sería nada nuevo que así se continúe con el nuevo Presidente, siempre y cuando dichas leyes se apliquen de forma equitativa,” precisa.

Por su parte en Princeton, localidad donde se ubica la mansión oficial del gobernador del estado y una de las universidades más prestigiosas del país, la alcaldesa Liz Lempert afirmó que apoyarán a todos los residentes de la municipalidad sin importar su estatus migratorio.

“Nos reunimos con instituciones locales y sin fines de lucro para comprometernos a mantener y construir un Princeton unificado, en una nación dividida. Como Alcalde y Consejo, reconocemos que nuestra comunidad es más potente debido a nuestra diversidad, no a pesar de esta diversidad, y nos comprometemos a apoyar a todos nuestros residentes sin importar su raza, religión, género, identidad de género, orientación sexual, estatus migratorio, discapacidad, posición económica u opiniones políticas,” señaló en un comunicado.

Llamó a los inmigrantes locales que, en caso de necesidad, se sientan libres de comunicarse con el Departamento de Servicios Humanos de Princeton al 609-688- 2055. La oficina está ubicada en 1 Monument Drive Princeton, NJ.