Raptors y su “misión imposible”, defender el título sin una superestrella

 

Los Raptors de Toronto hicieron su presentación oficial del día de los medios como flamantes campeones de la NBA, que tendrán de objetivo, la “misión imposible” de defender un título de liga sin ninguna superestrella dentro de la plantilla.

Ni el haber ganado las Finales, plagadas de lesiones de sus rivales, los Warriors de Golden State –Kevin Durant, Klay Thompson, DeMarcus Cousins, Andre Iguodala–, y auténticos “golpes” de suerte a favor del equipo canadiense, que dejó el índice más bajo de audiencia en la televisión, motivó al alero estrella Kawhi Leonard, único responsable del título, a permanecer con los Raptors.

Leonard, traspasado por los Spurs de San Antonio, tras superar una “polémica” lesión muscular que lo aportó de la competición de la temporada 2017-18, menos en nueve partidos, no quiso seguir con los Raptors porque desde el principio llegó para no quedarse.

El título de liga fue un plus que nunca se había planteado con los Raptors y de ahí que convertido en agente libre, la última opción que siempre tuvo fue el equipo canadiense.

Mientras que al final se decidió por los Clippers, donde también logró que llegase su amigo y All-Star, el alero Paul George, quien pidió salir de los Thunder de Oklahoma City.

Sin Leonard, y el escolta Danny Green, que fichó por los Lakers, los Raptors no tienen a una superestrella y su hombre más destacado es el base Kyle Lowry, que no está ni entre los cinco mejores de la liga, aunque fuese seleccionado al Partido de las Estrellas.

Junto a Lowry, el ala-pívot camerunés Pascal Siakam, de 25 años, cuarta temporada como novato, se proyecta como el jugador franquicia del futuro si al final confirma, que sin Leonard para salvarlos, puede confirmar el potencial de líder que en estos momentos carecen los actuales campeones de liga.

Además, sin Leonard, Siakam, que la pasada temporada nunca fue el primer objetivo a marcar por parte de las defensas rivales, cuando este año tenga mayor presión, está por ver cual va a ser su verdadera aportación ofensiva.

Aunque todavía le quedan dos años de contrato como novato, el gerente general de los Raptors, Masai Ujiri, admitió que el equipo ya trabaja para convertirlo en el futuro jugador franquicia, mientras que Siakam también ha asumido que esta temporada tendrá sobre sus hombros mayor responsabilidad que nunca.

El veterano pívot español Marc Gasol a sus 34 años se mantendrá como un jugador consistente y hombre de equipo, al igual que ala-pívot congoleño Serge Ibaka.

Mientras que el base Fred VanVleet, sin Green en el equipo tendrá más minutos, al igual que el alero inglés OG Anunoby, ya recuperado de la grave lesión que sufrió la pasada temporada, que comenzará la tercera como novato y podría ser de gran ayuda.

El resto de la plantilla son jugadores promedio de los que hay en la liga y con algunos jóvenes que el equipo técnico, que encabeza el entrenador Nick Nurse, y el que se encuentra el italiano Sergio Scariolo, actual entrenador de la selección de baloncesto de España, actual campeona del mundo, ya trabajan en desarrollar.

Pero todos dentro de la organización de los Raptors son conscientes que no tienen ninguna opción real de revalidar el título, aunque hayan apelado en su presentación ante los medios de comunicación con el lema de convertir el “We the North” en el “We Want More” y apelando al “espíritu” de equipo.

Lo máximo que les puede dar esa filosofía será en llegar a los playoffs, porque equipos como los Bucks de Milwaukee, Sixers de Filadelfia, Heat de Miami, Magic de Orlando, Celtics de Boston, Wizards de Washington, Nets de Brooklyn, Pacers de Indiana y Pistons de Detroit, tienen mejores plantillas.

Inclusive muchos analistas colocan a los Raptors como el peor equipo de los 30 que configuran la competición de la NBA cuando de comienzo la nueva temporada.

De ahí, que el momento más interesante para los Raptors en la temporada del 2019-20 será la jornada inaugural en su campo cuando el 22 de octubre reciban a los reconstruidos Pelicans de Nueva Orleans y su selección número, la sensación, Zion Williamson y todo el talento que les entregaron Los Angeles Lakers por Anthony Davis.

Ese día, los Raptors colocarán en el techo de su campo, el Scotiabank Arena, el banderín de campeones de la NBA, mientras que también recibirán de manos del comisionado Adam Silver, el anillo de campeones de unas Finales, que fueron auténtica pesadilla para su organización como las menos vistas en la historia de la liga.

A partir de ese momento, también el foco de atención del día a día en la competición de la NBA desaparecerá de Toronto para centrarse, donde se encuentran la mayoría de las grandes estrellas y que una temporada más estarán en la Conferencia Oeste. n

Equipos como los Clippers (Leonard y George), Lakers (LeBron James y Davis), ambos en Los Angeles; Rockets de Houston (James Harden y Russell Westbrook), Warriors de Golden State (Stephen Curry, Thompson y D’Angelo Russell), Trail Blazers de Portland (Damian Lillard), Jazz de Utah (Mike Finley, Donovan Mitchell y Rudy Gobert), Nuggets de Denver (Nikola Jokic), Mavericks de Dallas (Luka Doncic y Kristaps Porzingis), son sus destinos.El protagonismo en la del Este será para los Bucks (Giannis Antetokounmpo), Nets (Kyrie Irving y Durant), Sixers (Joel Embiid y Ben Simmons) y Heat (Jimmy Butler), mientras que los Raptors se consolarán con un banderín y anillos de campeones.