Brindan ayuda a presos liberados por el COVID-19

New Jersery Reentry Corporation, que dirige el ex-gobernador McGreevey empezó a recibir en una iglesia de Elizabeth a 14 ex-convictos liberados bajo la orden ejecutiva 124 del gobernador Phil Murphy que busca reducir la población carcelaria, 5 de ellos son hispanos y el resto afroamericanos, como parte de la autorización estatal para que iglesias del estado se conviertan en casas de refugio (shelters).

Bolívar Florez, funcionario de la institución, dijo que han ayudado a 100 personas con problemas de integración a la sociedad por no tener documentos, ni Medicare, ni un lugar donde vivir o no califican para las ayudas del gobierno por el COVID-19.

En Elizabeth serán recibidos los varones recién liberados que no tengan un lugar, mientras que en una locación de Newark serán ubicadas las mujeres.

En ésta última ciudad serán albergados en una facilidad de National Action Network, de la red del reverendo Al Sharpton, quien además participa con New Jersey Reentry Corp. y las iglesias locales en un programa para dar alimentos en ciudades de Nueva Jersey, a razón de 1,700 cenas al día. Informes al (201) 355-6308.

Florez indicó que, de acuerdo a cálculos de su institución, los liberados por la orden ejecutiva 124 son 1,300.

Al 28 de marzo, según cifras de la Asociación de Libertades Civiles de NJ (ACLU por sus siglas en inglés) proporcionadas a NJ.com los liberados fueron 700. Al cierre de ésta edición el ACLU ni el Departamento de Correcional de NJ confirmaron o desmintieron las nuevas cifras.

La orde ejecutiva 124 busca reducir la carga demográfica de las cárceles de Nueva Jersey, para controlar la diseminación del COVID-19, califican aquellos presos mayores de 60 años, los que sufren una enfermedad grave, los que recibirán libertad dentro de 3 meses y los que han visto denegados una apelación de libertad hace un año.

Los condenados por delitos sexuales están excluidos de éste proceso.

Funcionarios del Departamento Correccional de Nueva Jersey explicaron via-email que la liberación es un proceso caso por caso con el Departamento de Salud del estado.

“Se utilizan los registros médicos de la prisión y se proporciona una lista de elegibles a un Comité de Revisión Médica de Emergencia que decide si da lugar una recomendación de elegibilidad dentro de siete días, luego el Comisionado Correccional tiene tres días para decidir si otorga el encierro médico de emergencia en el hogar”, afirmó una vocera.

Además las visitas a las prisiones, que se habían suspendido por 30 días acabando el martes 14 de abril pasado, fueron suspendidas sin fecha de caducidad.“Las visitas ha sido suspendidas temporalmente. Al comprender el apoyo crítico que brindan las familias, el Departamento de Corrección ha aumentado el acceso a otras formas de comunicación, como llamadas telefónicas, uso del kiosco JPay y acceso al correo postal de los EE. UU., sin cargo, para mantener lazos con sus seres queridos,” agregó.