Músico invidente le preocupa el futuro de su profesión

Nelson Salmerón, residente del Condado de Passaic, toca la guitarra hace 13 años pese a ser medio invidente por culpa del glaucoma, suele tocar en las calles de Nueva Jersey y algunos días en el tren 7 de Nueva York.

El forma parte de Mariachi Repertorio Internacional de Nueva Jersey, pero sobre todo es un músico callejero

Puede decir que el Covid-19 ha pasado de largo en su vida. A mediados del mes pasado le dio gripe, tos seca y algo de fiebre pero, como dice, Dios Mediante no ha desarrollado la enfermedad.

“Mi papá es el único que no se me quiere acercar porque dice que lo he tenido (el covid-19),” dice Salmerón natural de El Salvador, pero el músico se sometió a la prueba del coronavirus hace dos semanas y el resultado fue negativo.

En el metro de Nueva York no recauda mucho, los tiempos en que embolsaba hasta 200 dólares al día ya pertenecen al pasado, apenas recauda 30 dólares “si no es menos” y el futuro es incierto.

En los últimos tres meses apenas ha tenido dos presentaciones, con sus compañeros del grupo mariachi

Sin embargo, no se preocupa por él sino por sus compañeros del grupo mariachi y por la situación de todos los músicos callejeros.

Parte de su manutención la recauda del seguro del desempleo, que se acaba a fines de julio, y el Social Security que le envía un cheque mensual por discapacidad.  “Claro, el dinero me falta pero tengo algo al menos, Me preocupan mis compañeros porque ellos están viviendo de sus ahorros que han tenido de su trabajo de músicos y se lo están acabando,” dice Salmerón.

Arturo Barrientos, músico y compositor residente en Nutley dijo que no estaría mal que el gobierno estatal, los condados o los municipios hicieran programas de presentaciones gratuitas en los parques o bibliotecas de Nueva Jersey para ayudar a los músicos.“Si hay la oportunidad y la buena voluntad de los legisladores y autoridades ¿porqué no hacerlo?”, dijo.