Pediatras recomiendan vacunación contra males comunes durante COVID-19

Pediatras de la Universidad de West Virginia (WVU) recomiendan a padres y cuidadores continuar con las visitas rutinarias de sus hijos al pediatra para evaluaciones de salud y mantener sus inmunizaciones al día. Según detallaron, de esta forma se previenen brotes de enfermedades más comunes que podrían complicar el escenario actual por la pandemia de COVID-19.

“Es esencial que sigamos protegiendo a los niños de las enfermedades que se pueden prevenir mediante la vacunación, durante una pandemia y siempre. Las vacunas mantienen a las comunidades saludables y nos protegen a todos, incluidos algunos de los más vulnerables de nuestra sociedad, los ancianos y los niños que son demasiado jóvenes para ser vacunados o tienen sistemas inmunes comprometidos”, dijo la doctora Lisa Cotello, profesora en la Facultad de Medicina de la WVU.

“La inmunización infantil de rutina es uno de los logros en salud pública durante el siglo pasado. Evidencia médica sólida continúa mostrando que las vacunas son seguras. Las vacunas son efectivas. Las vacunas salvan vidas”, añadió Cotello quien también es presidenta de la Academia Americana de Pediatría Capítulo de West Virginia.

Para la doctora Kathryn Moffett, de la WVU el cuidado infantil de rutina no se debe posponer y menos en medio de la pandemia del coronavirus. “Existe evidencia de que parte de la razón por la cual los niños no tienen una enfermedad tan grave como los adultos es la inmunización con la vacuna MMR (sarampión, paperas y rubéola). Por tanto, asegurarse de que los niños estén vacunados tiene mucha más importancia, es un doble beneficio”, indicó

Los padres latinos aparentan estar más conscientes de la importancia de la vacunación. Así lo demuestra un estudio nacional de la Universidad de Colorado publicado en junio, que resalta que los padres latinos dudan menos que los blancos en vacunar a sus hijos contra la gripe o en darles otras vacunas propias de la infancia.

Sin embargo, en los Estados Unidos (EE.UU.), una encuesta de pediatras reveló que la administración de las vacunas de MMR a principios de abril 2020 se redujo a la mitad en comparación con los dos meses anteriores.

Por otra parte, según el especialista David Helfott, la combinación de padres que permanecen socialmente aislados en casa con sus hijos y el cierre o la accesibilidad limitada de algunos consultorios médicos y clínicas ambulatorias durante la pandemia ha resultado en vacunas pediátricas perdidas.

De igual forma, Helfott destacó que los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) reportaron una marcada disminución de las órdenes de vacunas contra la influenza enviadas al Programa de Vacunas para Niños entre enero y abril de 2020 en comparación con el mismo período en 2019, y la mayor parte de la disminución se produjo después de que se declarara una emergencia nacional en los Estados Unidos por la COVID-19.

Estados con una alta población de latinos como Florida y Nueva York han mostrado a su vez una marcada disminución en cuanto a vacunación. Según Helfott, en Florida se administraron 40 % menos vacunas en abril de 2020 que en abril de 2019. Por su parte, en Nueva York, a mediados de mayo, las vacunas infantiles disminuyeron 63 % respecto al año anterior. La disminución fue del 91 % para niños mayores de dos años.

Para Helfott, la disminución en las tasas de vacunación durante la pandemia podría provocar brotes de enfermedades infecciosas transmisibles en EE.UU. y en todo el mundo.“Para el sarampión, un virus respiratorio extremadamente contagioso, las tasas de inmunización que caen por debajo del 95 % podrían conducir a una pérdida de la inmunidad. El aislamiento social y el uso de cubiertas faciales durante la pandemia de COVID-19 podrían proteger contra la propagación de todos los patógenos respiratorios, incluido el virus del sarampión, pero cuando estas medidas ya no son comunes, una población pediátrica vulnerable y no inmunizada queda expuesta”, acotó.