Trabajadores protestan falta de protección en almacén con 9 contagiados de COVID19

Un grupo de trabajadores y activistas comunitarios protestaron a las puertas del almacén de depósito (warehouse) de Barnes & Noble, para exigir que la compañía ofrezca medidas de seguridad que eviten la propagación del COVID-19.

Luego de que se hiciera público que 9 trabadores de este depósito, ubicado en Monroe, dieron positivo en las pruebas de COVID-19, y otros más presenten síntomas de posibles contagio, los trabajadores junto a miembros de organizaciones comunitarias como Cosecha y New Labor, protestaron el pasado martes frente a las puertas de la compañía.

“La negligencia e irresponsabilidad de Barnes & Noble ha convertido a nuestro lugar de trabajo en el epicentro del brote de COVID-19 en Monroe, Nueva Jersey. Hasta la fecha, nueve trabajadores han dado positivo por COVID-19 y muchos más muestran síntomas. Los trabajadores como yo no deberían tener que elegir entre mantenerse saludables o alimentar a nuestras familias. La compañía no ha mostrado ningún aprecio real por sus trabajadores. Algunos de mis compañeros de trabajo se ven obligados a trabajar en condiciones inseguras y el resto de nosotros nos quedamos en casa por miedo y sin ningún pago”, dijo Elsa Rodríguez, quien ha sido empleada del almacén de Barnes & Noble en las instalaciones de Monroe durante quince años, y una de las participantes de la protesta.

Los trabajadores entregaron un pliego de solicitudes a los representantes de la empresa en el que exigen el cierre del almacén por dos semanas para detener la propagación del virus; pagar a los trabajadores durante el cierre; limpieza profunda de las instalaciones del almacén durante el cierre; pago por riesgo (doble pago) a los trabajadores al retornar luego del cierre; equipo de seguridad para los trabajadores, como guantes, mascarillas, desinfectantes de manos; permitir a los trabajadores que se sientan enfermos permanecer en auto-cuarentena sin represalias; y asegurar que se cumplan las medidas de distanciamiento social dentro del almacén.

Carlos Rojas, de la organización Movimiento Cosecha, afirmó que los trabajadores que laboran en el almacén arriesgan cada día su salud, ya que no cuentan con ningún tipo de protección. 

Elsa Rodríguez, quien ha sido empleada del almacén de Barnes & Noble en las instalaciones de Monroe durante quince años, participó en la protesta.

En este establecimiento laboran cerca de 800 trabajadores, la mayoría de ellos hispanos  de localidades cercanas como Hightstown, Trenton, New Brunswick, Perth Amboy, entre otras.

La protesta de los trabajadores fue apoyada por los legisladores del distrito 14, al cual pertenece Monroe.

En un comunicado, la senadora Linda R. Greenstein señaló que los almacenes de depósito como Barnes & Noble tienen la responsabilidad de proporcionar un lugar de trabajo seguro y protegido durante la pandemia. 

“Apoyo firmemente las demandas de los trabajadores de un cierre de dos semanas del almacén, tiempo libre pagado durante esas dos semanas, limpieza completa de las instalaciones mientras está cerrado y pago por riesgos cuando los trabajadores regresen. Al volver a abrir, debe haber mejores precauciones de seguridad, incluyendo suficiente equipo de protección personal, distanciamiento social y limpieza. Los trabajadores deberían poder ponerse en cuarentena y negarse a trabajar sin represalias”. 

La senadora Greenstein aseguró que si Barnes & Noble no proporcionará un lugar de trabajo seguro durante esta pandemia, buscará la “intervención del gobierno estatal para garantizar que estos trabajadores estén protegidos”.

Alberto Arroyo, representante del sindicato Distribution and Food Service Joint Board (LDFS Union), Workers United/SEIU dijo que Nueva Jersey ha clasificado a estos trabajadores como esenciales, pero “Barnes & Noble ha hecho que los trabajadores se sientan desechables. Hacemos un llamado al gobierno del estado para que investigue por qué la pandemia ha infectado a muchos en estas instalaciones y para garantizar que la compañía implemente protocolos cruciales de salud y seguridad”.Carlos Rojas, de Movimiento Cosecha, afirmó que los representantes de Barnes & Noble recibieron el pliego de peticiones pero rechazaron dar una respuestas inmediata a las peticiones de los empleados, las cuales afirman que serán evaluadas.