Puertorriqueños son los latinos que más fuman
Los hombres puertorriqueños son los que más fuman y los dominicanos los que menos entre los hispanos en Estados Unidos, según un estudio divulgado por el Colegio Albert Einstein de Medicina, de la Universidad Yeshiva en Nueva York.
Según los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC), sólo el 12,5 por ciento de los latinos en EE.UU. fuman, lo cual coloca a este grupo demográfico en el segundo puesto más bajo de tabaquismo entre seis grupos étnicos.
“Pero un nuevo estudio de los Institutos Nacionales de Salud, que observó a más de 16.000 hispanos que viven en EE.UU., indica que estas cifras ocultan variaciones significativas entre los grupos latinos”, señaló el informe.
La edad media fue de 40,3 años entre los 6.532 hombres del contingente estudiado, y la edad media entre las 9.790 mujeres fue de 41,8 años.
Los investigadores del Colegio Einstein encontraron que la prevalencia del tabaquismo va desde el 35 por ciento de los hombres puertorriqueños al 11 por ciento de los varones dominicanos.
Los cubanos tienen una elevada tasa de tabaquismo, señalaron los estudiosos, con el 31 por ciento de los hombres y el 21,9 por ciento de las mujeres adictos a la nicotina, pero además, “tienen una alta intensidad de consumo medida en cajetillas por año y cigarrillos por día”, agregaron.
Las personas de otros orígenes regionales: México, América Central y América del Sur, tienen una prevalencia del tabaquismo que está cerca de la media para la población general, aunque es típicamente más alta entre los hombres que entre las mujeres.
“Las personas de bajo estatus socioeconómico son más propensas a fumar, menos propensas a dejar el hábito y son las que usan con menos frecuencia los tratamientos sin receta para abandonar el tabaquismo, comparadas con las personas de educación e ingresos más altos”, añadió el informe.
Una de las peculiaridades halladas por los investigadores entre la población latina es que los adultos hispanos “a menudo dicen que fuman de manera intermitente más que a diario, y entre algunos grupos, como los mexicanos y centroamericanos, los fumadores intermitentes son casi tantos o más que los fumadores cotidianos”.
“Entre los fumadores intermitentes documentamos niveles sustanciales de exposición al cigarrillo, medida por días en que fuman cada mes y el número de cigarrillos fumados cada día”, continuó el informe.
Otro aspecto al cual deberían prestar atención los médicos, según los investigadores, es que el uso de productos para abandonar el tabaquismo es relativamente bajo entre la población hispana, comparada con la población en general.
El consumo de cigarrillos en Estados Unidos es causa de más de 400.000 muertes prematuras y de 96.000 millones de dólares en pérdida de productividad cada año, según los estudios.
Los investigadores encontraron que, entre las mujeres, el haber nacido en Estados Unidos, y tanto entre hombres como en mujeres, el mayor grado de adaptación a la cultura estadounidense, aparecen vinculados con una mayor propensión al tabaquismo.
El informe añadió que “si bien la disminución general del tabaquismo en todo Estados Unidos a lo largo de décadas recientes demuestra la factibilidad de los esfuerzos eficaces para el control del consumo de tabaco, los datos indican que se necesitan esfuerzos adicionales para alcanzar a la población hispana”.