Autoridades instan a vacunar a niños ante brotes de tos ferina
Ante el aumento del 24 por ciento de los casos de tos ferina, las autoridades sanitarias instaron a vacunar a los niños en momentos en que además se presentan varios brotes del mal en diversas ciudades y entre comunidades inmigrantes.
“Está comprobado que con la vacuna se puede detener la enfermedad y que por el contrario cuando no se recibe la vacuna hay un incremento en los casos de pertussis en especial en los niños”, dijo Carlos Rodríguez, director médico del Centro de Cardiología de Nuevo Orleans, que además colabora con el Programa de Salud Ventanillas del Consulado de México en ese estado.
El experto señala la desinformación como una de las principales barreras que enfrentan para lograr aumentar la cobertura de la vacuna en las poblaciones más vulnerables. “La desinformación es una de las causas más problemáticas que hemos tenido para que más personas se vacunen, especialmente en la comunidad hispana”, aseveró.
En Estados Unidos, la vacuna contra la tos ferina se administra a los niños y a los bebés en conjunto con la de la difteria y el tétanos, también conocida como DTaP. Los menores deben vacunarse a los 2, 4 y 6 meses de edad, y luego recibir una cuarta dosis entre los 15 y 18 meses. Una quinta inyección debe aplicarse entre los 4 y 6 años. La protección puede disminuir con el tiempo, por lo que los Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC) recomiendan un refuerzo a los 11 o 12 años.
“Muchos hispanos no tienen conocimiento del acceso que hay aquí para recibir las vacunas, y algunos tienen hasta miedo de pedirlas, pero deben saber que no importa el estatus migratorio del niño, hay clínicas y centros adonde pueden acudir”, aseveró el galeno.
El Programa de Vacunas para Niños (VFC) ofrece vacunas sin costo a través de médicos participantes en el programa, información que está en la página de internet de los CDC.
De acuerdo con los CDC, desde el 1 de enero hasta el 16 de junio pasado, 50 estados y Washington, DC, reportaron 9.964 casos de tos ferina a la agencia federal, lo que representa un aumento del 24 por ciento en comparación con el mismo periodo en 2013.
Durante 2013 se reportaron 24.231 casos de tos ferina a los CDC, con una mayor incidencia entre adolescentes.
La tos ferina o pertussis se ha convertido en un problema de salud recurrente durante los últimos años, con brotes cada vez más constantes.
California declaró la enfermedad como epidemia en junio pasado, luego de que se reportaran cerca de 3.458 casos entre el 1 de enero y el 10 junio y más de 800 casos solo en las últimas semanas.
Asimismo, se ha registrado otro brote entre miembros de una comunidad trabajadores inmigrantes en el estado de Washington, luego de que autoridades locales confirmaran 3 casos e iniciaran una investigación para determinar si podrían haber más de 200 personas contagiadas. Como medida de prevención, las autoridades estatales prescribieron antibióticos a los pacientes y han ofrecido vacunar a los trabajadores de la zona afectada.
Los síntomas del mal se presentan, por lo general, 7 a 10 días después de que la persona ha estado expuesta a la bacteria, pero algunas veces pueden pasar hasta 6 semanas antes de que aparezcan los síntomas.
La enfermedad por lo general se transmite cuando la persona que tiene la enfermedad tose o estornuda cerca de otras personas y los síntomas en un principio son similares a los de un resfrío.
Los recién nacidos, que no están aún cubiertos por la vacuna, son uno de los grupos en más alto riesgo y generalmente contraen la enfermedad a través de sus padres, hermanos o personas que los cuidan, quienes probablemente ni siquiera saben que padecen la enfermedad.
Las autoridades recomiendan proteger a los bebés manteniéndolos alejados de personas fuera del entorno familiar con tos o síntomas de resfriado.