Advierten enfermedades transmitidas por alimentos
Las principales causas de los brotes multiestatales —Salmonella, E. coli y Listeria— son más peligrosas que las principales causas de brotes que se producen en un solo estado. Estas tres bacterias, que causan el 91 % de los brotes multiestatales, pueden contaminar alimentos ampliamente distribuidos —como verduras, carne de res, pollo y frutas frescas— y terminar enfermando a personas en muchos estados.
“Las personas en los Estados Unidos no deberían tener que preocuparse acerca de contraer una enfermedad a través de los alimentos que consumen”, dijo el director de los CDC, Tom Frieden, M.D., M.P.H. “Epidemiología de primera y nuevas herramientas de secuenciación de genes nos están ayudando a rastrear rápidamente el origen de los brotes de enfermedades transmitidas por los alimentos, y junto a nuestros socios a nivel nacional estamos trabajando con la industria alimentaria para evitar que ocurran en primer lugar”, agregó.
El informe de Signos Vitales analizó datos del Sistema de Vigilancia de los Brotes de Enfermedades Transmitidas por los Alimentos, de los CDC, durante el periodo 2010-2014.
Los científicos de los CDC compararon la cantidad de enfermedades, hospitalizaciones y muertes por causa de brotes en dos o más estados con aquellas que se produjeron por brotes ocurridos en un solo estado.
Hallaron que los 120 brotes multiestatales que ocurrieron en el periodo de estudio de cinco años fueron responsables del 11 % de todas las enfermedades ocurridas en brotes de enfermedades transmitidas por los alimentos, del 34 % de las hospitalizaciones y del 56 % de las muertes. Un promedio de 24 brotes multiestatales ocurrieron al año, y cada uno afectó de 2 a 37 estados.
Otros puntos importantes del informe sobre los brotes multiestatales de enfermedades transmitidas por los alimentos durante el periodo 2010-2014 incluyen:
La Salmonella representó la mayoría de las enfermedades y hospitalizaciones, y fue la causa de los tres brotes más grandes, los cuales tuvieron su origen en huevos, pollo y atún molido crudo.
La Listeria causó la mayoría de las muertes, principalmente debido a un brote provocado por melón cantalupo contaminado en el 2011 que causó la muerte de 33 personas.
Los alimentos importados representaron 18 de los 120 brotes reportados. Alimentos importados de México fueron la principal causa de estos brotes, seguidos de alimentos importados de Turquía.
El informe de Signos Vitales recomienda que las agencias de salud locales, estatales y nacionales trabajen estrechamente con la industria alimentaria para entender cómo se producen y distribuyen sus alimentos a fin de acelerar las investigaciones de brotes multiestatales. Estas investigaciones pueden revelar los problemas que causaron la contaminación de los alimentos y que se pueden solucionar, y las lecciones aprendidas que pueden ayudar a fortalecer la seguridad alimentaria.
El informe destaca la necesidad de que la industria alimentaria tenga un mayor rol para mejorar la seguridad alimentaria al seguir las mejores prácticas de producción, procesamiento y transporte de los alimentos. Además, la industria alimentaria puede ayudar a detener los brotes y a disminuir su impacto al mantener registros detallados que permitan rastrear los alimentos más rápidamente desde su origen hasta su destino, al usar las tarjetas de clientes frecuentes para ayudar a identificar qué alimentos enfermaron a las personas y al notificar a los clientes qué alimentos son retirados del mercado.
Bajo la Ley de Modernización de la Seguridad Alimentaria, de la FDA del 2011, la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) está creando nuevas normas que no solo exigirán que los importadores verifiquen que sus proveedores cumplan con los estándares estadounidenses de seguridad alimentaria, sino que también responsabiliza tanto a las compañías nacionales como extranjeras de la prevención de enfermedades transmitidas por los alimentos antes de que ocurran. Las normas finales de controles preventivos fueron anunciadas en septiembre y normas adicionales sobre productos agrícolas, alimentos importados, adulteración intencional y transporte higiénico de alimentos se esperan en los próximos meses.
“La asociación continua de la FDA, los CDC, el USDA y nuestros socios a nivel estatal y local es esencial para responder a los brotes de enfermedades transmitidas por los alimentos. Pero los consumidores deben poder tener confianza en que se están tomando medidas desde la granja hasta la mesa para minimizar el riesgo de contraer una enfermedad a través de los alimentos que les dan a sus familias”, dijo el subcomisionado de la FDA para Alimentos y Medicina Veterinaria, Michael R. Taylor. “Al seguir trabajando con nuestros socios en el gobierno y la industria, podemos crear un sistema de seguridad alimentaria y una cultura centrada en la prevención”, afirmó.
Durante los últimos seis años, el Departamento de Agricultura de los EE. UU. (USDA) ha asumido un enfoque científico cada vez mayor para prevenir las enfermedades transmitidas por los alimentos, que depende en gran medida de los datos disponibles, las tendencias y los avances tecnológicos.
“La principal prioridad del Servicio de Inocuidad e Inspección de los Alimentos, del Departamento de Agricultura de los EE. UU., es evitar que ocurran brotes multiestatales de enfermedades transmitidas por los alimentos. A medida que miramos hacia el futuro, el USDA seguirá trabajando con la FDA, los CDC, la industria y los estados para promover nuestro enfoque científico en la seguridad alimentaria”, dijo Phillip Derfler, subadministrador del Departamento de Agricultura de los EE. UU. para el Servicio de Inocuidad e Inspección de los Alimentos. “Si nos concentrarnos en la colaboración y la modernización, estamos seguros de que habrá una disminución en los brotes multiestatales”, agregó.
Los consumidores pueden visitar el sitio www.foodsafety.gov para obtener información sobre alimentos retirados del mercado, y para aprender más sobre cómo manipular y preparar alimentos de manera segura. También pueden obtener y usar tarjetas de clientes frecuentes para que las tiendas puedan comunicarse con ellos si compran un producto que sea retirado del mercado.