Keiko Fujimori visita NJ en medio de acusaciones
Keiko Fujimori se apresta a presentarse como candidata de Fuerza Popular el 2021, al menos eso es lo que dicen las pancartas que pusieron sus partidarios, en dos eventos el sábado y domingo último en Paterson, pero la sombra de las acusaciones la persiguen.
La mas fuerte es la acusación, destapada nuevamente días antes de su viaje a Estados Unidos, de haber recibido dinero de la empresa brasileña Odebrecht , que se investiga coimeó bajo la mesa a aspirantes a presidentes, ministros y presidentes de países como Perú, República Dominicana, Ecuador, Venezuela, Argentina, en la investigación denominada “Operación Lava Jato”.
Todos recibían coimas para asegurar contratos públicos millonarios, los partidos oficialistas y no oficialistas: el dinero no tiene ideología. El nombre de Keiko figura en la agenda de Marcelo Odebrecht, el mandamás de Odebrecht, y en las conversaciones entre el encargado en el Perú, Jorge Barata, y su jefe.
Keiko Fujimori, presidenta de Fuerza Popular, negó en un evento de puerta cerrada a la prensa, ante partidarios venidos de nueve estados, el sábado último, haber recibido coimas.
“La última cortina de humo que dice: que Fuerza Popular ha recibido plata de Odebrecht. Falso, señores. No conozco a Marcelo Odebrecht. Lo único que he hecho fue ver al señor (Jorge) Barata (representante de Odebrecht en Perú, que recibió ordenes de darle más dinero a Keiko, según las investigaciones en curso N.R.) en un evento como candidata presidencial,” dijo Keiko, en videos difundidos en redes sociales.
Tampoco conocieron a Marcelo Odebrecht, vale aclarar, Nicolás Maduro, presidente de Venezuela y Nicolás Capriles candidato presidencial, que recibieron coimas de Odebrecht, como tampoco el vicepresidente del Ecuador, Jorge Glas Espinal, como tampoco algunos de los personajes, salvo Ollanta Humala y Alan García del Perú y el presidente Lula da Silva, entre tantos de 12 países acusados de recibir 349 millones de dólares en sobornos, entre 2003 y 2016, según las cifras del Departamento de Justicia de los Estados Unidos.
También se le aprecia en los video, micrófono en mano, justificando el castigo de suspensión de 60 días de su bancada contra su hermano Kenji Fujimori, por desacatar a la facción congresal de Fuerza Popular.
“Mi hermano fue suspendido. Yo pienso que si se falta el respeto no importa cuál sea el apellido: tiene que recibir una sanción y yo tengo que dar el ejemplo como presidenta del partido de respetar la voluntad institucional de la bancada,” dijo Keiko.
Kenji, el congresista más votado de su bancada, publicó mensajes en twitter calificando al congreso de “coliseo de la república” por la censura del ministro de economía Alfredo Thorne a la vez que los acusó de “blindar” al grupo Sodalicio de Vida Cristiana, acusado de abusos sexuales contra niños.
Keiko mostró su acuerdo con la creación del Distrito Electoral de Peruanos en el exterior y además dejó a los dos congresistas de su bancada que asistieron, Luz Rubianes y Miguel Torres Morales, el encargo de aprobar el voto por correo, sugiriendo comenzar con un piloto en Estados Unidos, ya que el 45% de los electores del extranjero no votaron. Fuerza Popular tiene actualmente el control del congreso peruano.
La ligereza de Fuerza Popular lució delgada, con varios kilos de menos desde su última visita electoral a Nueva Jersey, en el 2011.
El domingo participó de un carnaval del departamento de ayacucho, una fiesta costumbrista peruana, donde bailó huayno con pericia y se tomó fotos con sus partidarios.
Estuvo rodeada de un discreto pero efectivo resguardo policial. Desde el público un espectador le gritó !asesina!, recordando su papel de primera dama en el gobierno de su padre, Alberto Fujimori, actualmente en prisión por violaciones a los derechos humanos, pero el agua no llegó al río