Confinamiento no dejará en los niños huella psicológica

La reclusión por la pandemia del coronavirus puede ser una fuente de estrés para los menores de la casa, pero a la larga no les dejará una huella psicológica profunda ya que los niños saben adaptarse, sugirieron expertos en pediatría clínica.

Se trata de un tiempo “relativamente corto” en la vida de los menores, por lo que Ami West, profesora de Pediatría Clínica de Kerk, no cree que esta situación les vaya a dejar a los niños una huella psicológica muy profunda, excepto en aquellas familias que han sufrido la pérdida de algún ser querido debido a la pandemia.

“Los niños son más adaptables y menos dados a sufrir en este tipo de circunstancias, especialmente si todos estamos atentos a ayudar y a compartir”, señaló West durante un foro virtual organizado por la Universidad del Sur de California (USC). 

Darby Saxbe, directora del Centro Dornsife de la USC, señaló que la cuarentena es un “momento único” que “da la oportunidad de compartir emociones y también de tratar de conectarnos adecuadamente con aquellos que están más aislados”.

Para Marian Williams, profesora de Pediatría Clínica de la Escuela de Medicina Kerk de USC, dijo que una explicación sencilla de lo que está pasando, acorde a su edad, es suficiente para que puedan entenderlo sin tener que insistir sobre el tema.

La situación producida por la pandemia ha resaltado la gran desigualdad económica entre diferentes sectores de la sociedad, comentó Clare Pastore, profesora de práctica legal de la Escuela de Leyes Gould de USC.

Los afroamericanos y los latinos han sufrido especialmente el azote del virus, manifestado en los altos índices de mortalidad de estos grupos, y ello porque ha quedado en evidencia “la diferencia en la calidad de la salud y cómo algunos grupos como los afroamericanos son más propensos y han sufrido efectos más graves”, señaló Pastore.

Para Dorian Traube, profesora asociada de trabajo social de la Escuela Suzanne Dworak Peck de USC, es importante que en estos momentos de crisis las familias obtengan los recursos de ayuda que brindan tanto el gobierno federal como los gobiernos estatales y locales.Traube igualmente destacó la importancia de la comunicación tecnológica, no sólo para la formación académica de los niños sino en general para estar en contacto con otros miembros de la familia y amigos.