El gol, cosecha del 87
Carlos Mateos Gil / EFE
Hay generaciones de futbolistas que son difíciles de olvidar por su legado y probablemente eso sucederá en el futuro con la de los nacidos en el año 1987, caracterizada por el acierto cara a puerta de algunos de sus miembros.
De entre todos ellos destaca el argentino Lionel Messi, quien vino al mundo el 24 de junio a caballo entre el trágico atentado de la banda terrorista ETA en el Hipercor de Barcelona que se cobró la vida de 21 personas y el arranque de la trigésimo tercera edición de la Copa América disputada en Argentina.
Una ciudad, la española, y un país, el suyo de nacimiento, que de momento han marcado la carrera del ya considerado por algunos como el mejor jugador de todos los tiempos, en gran parte debido a sus goles.
Máximo anotador en la historia del conjunto azulgrana y de la selección albiceleste, dueño de seis Botas de Oro, siete veces máximo artillero de LaLiga, seis veces Balón de Oro… Messi ha pulverizado infinidad de récords y a buen seguro mantiene el hambre intacta después de un verano en el que ha sido real la amenaza de abandonar el club donde ha pasado toda su trayectoria profesional.
El argentino es sin duda el cabeza de cartel de su añada pero hay contemporáneos que no le desmerecen como es el caso del uruguayo Luis Suárez, quien ha sido compañero suyo en el Camp Nou durante las últimas temporadas.
Cinco meses exactos separan el alumbramiento de uno y otro, pues Suárez vino al mundo un 24 de enero del año 1987. Al día siguiente Helmut Kohl se proclamó ganador de las elecciones en Alemania Federal.
Desde entonces el internacional de Salto ha ido labrándose una carrera envidiable en su país natal, en Holanda, en Inglaterra y finalmente en España. Lo ha hecho siempre con el gol como principal argumento, independientemente de la camiseta que le tocara defender.
Hasta tal punto es así que ha logrado ser el máximo anotador al menos una vez en todas las ligas europeas por las que ha pasado. Tiene además en su haber dos Botas de Oro, puede presumir de ser el tercer jugador con más acierto en la historia del Barcelona y lidera la clasificación histórica de goleadores con su combinado nacional. En estas horas y jornadas se está jugando dónde continuar su carrera.
En el apartado de artilleros celestes le sigue de cerca Edinson Cavani, atacante vecino de su misma ciudad y que hizo acto de presencia en el mundo solo 21 días después. Aquel día de San Valentín comenzó otro romance con las redes.
Libre actualmente tras abandonar las filas del París Saint-Germain como el delantero con más tantos que jamás vio la entidad, de su instinto en el área comenzó a saberse cuando fue el máximo goleador del Sudamericano sub-20 del 2007. Luego llegarían un reconocimiento de idéntica índole en Italia, que traería consigo la Bota de Bronce, y otros dos en Francia.
Completa la lista de grandes arietes sudamericanos de 1987 otro argentino, Gonzalo Higuaín. Recientemente fichado por el Inter Miami tras su paso por la Juventus, al igual que Cavani también fue ‘Capocannoniere’ con el Nápoles. En su caso además el jugador nacido el 10 de diciembre estableció una marca de 36 dianas que le valió para ser Bota de Plata y que nadie había igualado hasta que el pasado curso lo consiguió Ciro Immobile.
Cambiando de continente, en Europa también hay casos de los que presumir. Uno de ellos es el de Karim Benzema, solo nueve días más joven que Higuaín y ex compañero suyo en las filas del Real Madrid durante varias campañas.
En su caso solo cuenta con un título de máximo goleador, el conseguido en la liga francesa tras la temporada 2007-2008, pero su figura va más allá de ese éxito personal. Regular en su producción ofensiva cada temporada, de él se valora también mucho su capacidad para facilitar que los demás también puedan celebrar dianas.
Todo ello sin olvidar que en la actualidad es el quinto máximo goleador en la historia de la Liga de Campeones y que ocupa el mismo puesto en el Real Madrid solo por detrás de Cristiano Ronaldo, Raúl, Di Stéfano y Santillana tras haber dejado ya por el camino a Puskas.
Unos y otros han marcado época pero no son los únicos nombres prolíficos que dio aquel año. Está también por ejemplo el de Jamie Vardy, héroe de aquel Leicester que logró una de las gestas más inesperadas jamás vistas como fue la conquista de la Premier League en el 2016 y que en la 2019-2020 lideró la tabla de goleadores. O el belga Dries Mertens, cuyo cumpleaños es el 6 de mayo y que lleva varias campañas rindiendo a gran nivel en el Nápoles.
Y en España hay asimismo un buen referente, Iago Aspas. El gallego aterrizó en Moaña el 1 de agosto para alegría posterior de un Celta de Vigo donde actualmente es santo y seña y con el que se ha proclamado hasta en tres ocasiones máximo goleador español de Primera.