Urgen al congreso extender la fecha del Censo para entregar los resultados
Kleibeel Marcano / Reporte Hispano
Organizaciones de derechos civiles hicieron un llamado al congreso para que extienda las fechas de entrega de los resultados de la data colectada por el Censo de modo que se garantice un efectivo proceso de verificación de la información colectada.
“El Censo no ha terminado aún. Lo que terminó fue la fase de colección de data. Ahora están en la fase de procesar, verificar y certificar la data. Esta fase es crucial y los funcionarios tienen una fecha para entregar los resultados que es imposible de cumplir”, afirmó Vanita Gupta, Directora Ejecutiva de la organización Leadership Conference on Civil and Human Rightsdurante una rueda de prensa organizada por Ethnic Media Services.
Por ley, la Oficina del Censo debe entregar los recuentos de prorrateo al presidente el 31 de diciembre del 2020 y el 1 de abril del 2021 los recuentos de redistribución de distritos a los estados
La pandemia del COVID-19 que azota al país obligó a que la fase de colección de data del censo se extendiera hasta el pasado 6 de octubre. Esto ha reducido el tiempo para la fase de procesamiento de la data, que normalmente dura cinco meses a sólo dos meses y medio.
“La Oficina del Censo, la Oficina de Responsabilidad del Gobierno del Congreso y el Inspector del Departamento de Comercio han dicho claramente que se necesita más tiempo para que los funcionar del censo puedan procesar la data”, resaltó Gupta, quien advierte que de lo contrario obligará a los funcionarios a saltarse procedimientos de verificación de la información que afectará negativamente los resultados y la data por toda una década.
El Congreso debe asumir su responsabilidad
Arturo Vargas, Director Ejecutivo de NALEO Educational Fund, exigió al Congreso asumir su responsabilidad y aprobar una ley que extienda la fecha para la entrega de los resultados del Censo.
Vargas aclara que es el congreso quien tiene la responsabilidad legal de garantizar que los funcionarios del Censo tengan el tiempo suficiente para realizar su trabajo de manera correcta.
Vargas señala que la fecha para la entrega de los recuentos de prorrateo al presidente debe posponerse del 31 de diciembre del 2020 al 1 de abril del 2021, y la fecha para los recuentos de redistribución de distritos a los estados pasar del 1 de abril al 1 de julio del 2021.
A mediados de año el congreso analizó un proyecto de ley para extender el plazo de entrega de los resultados, pero la presión política de la administración del presidente Trump ha impedido que se apruebe.
“El censo es la base de la democracia. Las presiones contra el conteo para obtener beneficios políticos debilitan al sistema democrático”, advirtió Vargas.
El representante de NALEO señaló que las comunidades minoritarias, incluyendo a los latinos, serán las más afectadas en un procesamiento chapucero de la data.
Afirma que históricamente han habido intentos para no contar al a comunidad hispana, a pesar de las ya existentes barreras. Señala que en el censo de 1990 hubo leyes y litigaciones para excluir a los inmigrantes indocumentados; en el 2000 los intentos para que los funcionarios del censo corrijan la data fue prohibido por la corte; en el 2010 se realizaron llamados a los inmigrantes para un boicot contra el Censo; y en este 2020 la interferencia política del gobierno federal ha sido de un descaro nunca antes visto, con intentos de agregar preguntas sobre la ciudadanía y su intención de que los inmigrantes indocumentados no sean considerados en el conteo final.
A esta interferencias política de la administración de Trump se le une la pandemia del COVID-19, los desastres naturales como masivos incendios y huracanes que han afectado a estados con grandes comunidades hispanas como California, Colorado, Oregón, Washington, Florida y Texas, lo que ha hecho más difícil el conteo de la comunidad latina.
El 99% de las viviendas censadas es una “noticia falsa”
Marc Morial, Presidente y CEO de la National Urban League, afirmó en la rueda de prensa que es una “noticias falsas” que la oficina del Censo obtuvo la información del 99.9% de las viviendas del país.
“Esta es una falsa noticia, un mito. En muchos centros urbanos del país como Detroit, la tasa de autorespuestas no fue más de 68%”, afirma.
Morial señala que la reducción de casi un mes del tiempo estipulado para que los enumeradores colecten la información de la gente que no llenó por si sola el cuestionario afectó negativamente a las zonas urbanas, en especial a las comunidades minoritarias. “Reducir ahora a la mitad el tiempo para el procesamiento de la data afectará aún más a estas comunidades, que históricamente no han sido contadas correctamente”, dijo.
El activista predice que todas las comunidades, especialmente las minoritarias, dejaran de recibir miles de millones de dólares en fondos federales para educación, salud, infraestructura y programas sociales, entre otros a causa del conteo inadecuado y el procesamiento de los datos del censo.
Ante esta situación insta al público a contactar a sus representantes en el congreso y el senado para exigirle que aprueben una ley que extienda el tiempo para que la Oficina del Censo entregue los resultados del conteo.