Después de años de lucha, las comunidades obtienen nuevas herramientas para combatir la contaminación

Tom Johnson, Reportero de medio ambiente / energía

Los reguladores establecen las normas para poner en práctica la ley de justicia ambiental

Después de años de debate, el Departamento de Protección Ambiental estableció normas nuevas y estrictas destinadas a reducir la contaminación en las comunidades de Nueva Jersey que ya están bajo altos niveles de contaminación, donde las personas experimentan impactos adversos en la salud debido a esa mayor contaminación.

Las normas de justicia ambiental publicadas el lunes han sido descritas como las más estrictas de la nación para ayudar a los residentes a detener cualquier instalación nueva que genere contaminación, que históricamente ha estado ubicada en comunidades más pobres y comunidades de color.

Las nuevas normas, que entran en vigencia de inmediato, brindan a esas comunidades mejores perspectivas para desafiar y bloquear permisos nuevos o ampliados que buscan las plantas de energía, las instalaciones de tratamiento de aguas residuales y las principales fuentes nuevas de contaminación del aire ubicadas dentro de sus fronteras.

Pero los intereses comerciales, que libraron una ferrea oposición a la ley de tres años que creó el programa, argumentaron que estas regulaciones podrían bloquear la entrada de cualquier nueva fábrica en el estado y evitar la expansión de los negocios existentes.

Sin embargo, para la comunidad ambiental, la adopción de las normas pone fin a una cruzada de casi una década para llevar justicia a esas comunidades afectadas. Muchas personas que viven en estas comunidades sufren una variedad de problemas de salud causados por el aire insalubre y los contaminantes en el agua potable, así como por la exposición a metales tóxicos, como el plomo en la pintura. La contaminación del aire puede causar asma y el plomo en el agua potable puede causar problemas de desarrollo en los niños.

Un largo proceso 

El gobernador Phil Murphy firmó una ley en 2020 creando el programa, pero tomó más de dos años redactar y adoptar sus normas después de un largo proceso público.

“Estas normas son una parte importante del proceso para proteger a las comunidades afectadas por los impactos acumulativos de la contaminación de instalaciones no deseadas en su vecindario”, dijo Kim Gaddy, directora nacional de justicia ambiental de Clean Water Action. “Deben aplicarse de inmediato”.

Varios proyectos controvertidos podrían enfrentar dificultades para obtener la aprobación a la luz de las nuevas normas, incluida una planta de energía de respaldo en la planta de tratamiento de aguas residuales de la Comisión de Alcantarillado de Passaic Valley en Newark.

Según las normas, el DEP podría denegar un permiso para un nuevo proyecto si los reguladores descubren que impondría un impacto desproporcionado en los niveles de contaminación en una comunidad sobrecargada, a menos que esos efectos puedan mitigarse mediante nuevas tecnologías de control de la contaminación. La agencia ahora puede establecer condiciones de permisos para proteger mejor a las comunidades vulnerables.

Sin embargo, cuando se identifica un impacto negativo, el departamento podría aprobar un proyecto si existe un interés público apremiante para que avance.

“Con la adopción de las primeras normas de EJ (justicia ambiental, por sus siglas en inglés) de la nación, Nueva Jersey está en camino de proteger de manera más equitativa la salud pública y el medio ambiente que compartimos”, afirmó el comisionado del DEP, Shawn LaTourette.

Si bien el departamento hizo algunos cambios en las normas propuestas, no fue lo suficientemente lejos para satisfacer los intereses comerciales.

¿Quién se opone?

“Desafortunadamente, estas regulaciones exceden la intención legislativa, no están equilibradas de ninguna manera y no reconocen los beneficios que los empleos bien remunerados brindan a las comunidades y al estado en general”, señaló Ray Cantor, director de asuntos gubernamentales de NJBIA (Asociación de Negocios e Industria de Nueva Jersey).

Dennis Hart, director ejecutivo del Consejo de Química de Nueva Jersey, dijo que su organización está revisando las regulaciones para determinar si exceden la intención legislativa. Señaló que hay más de 300 áreas del estado que han sido identificadas como áreas de justicia ambiental.

“Los legisladores deberían preocuparse si esas áreas del estado no pueden tener nuevos negocios ubicados en esas comunidades”, considera Hart.

Ocho tipos de instalaciones están cubiertas por las nuevas reglas. Incluyen las principales fuentes de contaminación del aire (centrales eléctricas alimentadas con gas e instalaciones de cogeneración); plantas de tratamiento de aguas residuales, incineradores de basura; instalaciones de residuos sólidos o estaciones de transferencia; instalaciones de reciclaje; plantas de chatarra; vertederos; e incineradores de desechos médicos.

María López-Nuñez, subdirectora de organización y defensa de Ironbound Community Corporation, dijo que espera que las normas pongan fin al legado de ubicar industrias tóxicas en comunidades de color de bajos recursos.

“Mostrará a otros estados que el cielo no se va a caer si llevas la justicia ambiental a una comunidad”, afirmó.

This translation was provided by Reporte Hispano, in association with the Montclair State University Center for Cooperative Media and is financially supported by the NJ Civic Information Consortium. The story was originally written in English for NJspotlightnews.org and is republished under a special content-sharing agreement through the NJ News Commons Spanish Translation News Service.

Esta traducción fue proporcionada por Reporte Hispano, en asociación con el Centro de Medios Cooperativos de la Universidad Estatal de Montclair, y cuenta con el apoyo financiero del Consorcio de Información Cívica de NJ. La historia fue escrita originalmente en inglés por NJspotlightnews.org y se vuelve a publicar en virtud de un acuerdo especial para compartir contenido a través del Servicio de noticias de traducción al español de NJ News Commons.