Tito Atienza (izq) y su tío Jorge Vega (Der), propietario y coleccionista de autos, que sacó a las calles siete de sus vehículos, que desfilaron el domingo 21 de mayo en la parada cubana de la ciudad de Elizabeth, NJ, posan con el Ford Fairlane sedan de 1962.

Nostalgia del auto americano antiguo en parada cubana de Elizabeth

La afición de los residentes cubanos de New Jersey por los autos americanos antiguos se manifestó el domingo 21 de mayo último en la parada cubana de la ciudad Elizabeth, condado de Union, con la exhibición de autos de Jorge Vega, de 77 años.

Vega, natural de Bayamo Cuba, residente Elizabeth desde 1959, presentó siete vehículos de su colección, de los ocho autos americanos antiguos, la mayoría de la marca Ford (2 autos gemelos), Chevrolet: Corvette, Chevy, Camaro, Impala y un Buick que pasearon a lo largo de la calurosa tarde dominical, en Elizabeth Avenue, embanderada con banderas cubanas para celebrar la efemérides.

Un contraste con la exhibición de carros deportivos último modelo, tipo corvette que también desfilaron, para complacencia de los asistentes.

El auto preferido del cubano es un Ford Fairlane sedan 1962, que exhibe un precio de venta de $31,900 en la web especializada CarGurus.com.

El auto descapotable, color naranja, asientos de cuero, con 99 mil millas de recorrido, lo usa en ocasiones especiales. El mantenimiento del mismo lo suele hacer en el taller de su sobrino Tito Atienza, que lo acompañó en todo el desfile.

“Lo compré hace quince años, se conserva con todas sus piezas y accesorios originales. Solamente lo uso para las paradas y, a veces, para dar una vueltecita aquí y allá. El precio real no lo he averiguado, lo tengo hace muchos años al igual que los otros” dijo Vega.

Ha viajado a Miami con uno de sus autos, en repetidas oportunidades. Para eso escoge el Ford modelo Sunliner del año 1956, que acumula 99,000 millas de recorrido. Afirma que nunca le ha dado problemas en dichas travesías.

Al cubano siempre le gustaron los autos americanos antiguos, desde que vivía en su país de origen, pero resalta que los autos americanos solamente llegaron a La Habana hasta los años 1959 y 1960. Su auto preferido no llegó a circular en las calles de su país porque fue fabricado en 1962, cuando el régimen imperante ya no permitía el ingreso de tales vehículos.

Tito Atienza, de 52 años, nacido en suelo estadounidense, propietario de AA Auto Body en Trinity Place, Elizabeth, manifestó que su familia  comparte la afición de su tío  por estos autos, a la vez que su empresa colabora en mantener los vehículos en buen estado. El preferido de Tito es un Buick de 1961, el primero que encabezaba el desfile de autos americanos.

“Él es el que tiene la pasión por los autos americanos de época, nosotros lo apoyamos y compartimos siempre con los eventos a los que nos invitan,” agregó.

Como curiosidad se puede anotar que la ciudad natal de Jorge Vega, Bayamo, es conocida como “La ciudad de los coches” en Cuba, porque allí imperan los coches tirados a caballo, una práctica que se conserva desde el siglo XIX.

Actualmente, según el portal Acróbata del Camino, dos tercios de los vehículos que circulan en Cuba son viejos autos americanos, que ruedan gracias a la inventiva de hacerlos funcionar con piezas de otras marcas.