Crece el sentimiento antiinmigrante en los evangélicos del país, incluido los hispanos
El respaldo hacia los inmigrantes por parte de los evangélicos de Estados Unidos, incluso entre los hispanos de ese credo religioso, se ha reducido de forma importante en los últimos dos años, revela una encuesta nacional.
El sondeo, realizado de manera conjunta por Lifeway Research y la Mesa Evangélica de Inmigración, encontró que cada vez son más los evangélicos que piden “medidas adicionales” por parte del Congreso para prevenir la llegada de nuevos inmigrantes, así como restricciones para obtener la residencia o la ciudadanía.
“Muchos evangélicos temen que nuestra nación se verá perjudicada por el volumen de inmigrantes recientes, aunque muchos también se sienten responsables de mostrar compasión”, comentó Scott McConnell, director ejecutivo de Lifeway Research.
En concreto, el 50 % de los evangélicos consultados sostiene que los inmigrantes representan “un desafío a la economía del país”, un salto significativo respecto al 33 % que opinaba así en 2022, mientras que el 38 % afirma que los inmigrantes son “una amenaza a la seguridad de los ciudadanos” (por encima del 32 % de 2022).
De igual modo, menos de la tercera parte de las iglesias evangélicas abordan la inmigración en sus predicaciones por el miedo de los pastores a que el tema “cause divisiones en este año electoral”, aseveró Matthew Soerens, coordinador nacional de la Mesa Evangélica de Inmigración.
En el caso específico de los evangélicos hispanos, la mitad de los consultados indicó que en sus iglesias no se habla de inmigración y más de la mitad (58 %) de esas congregaciones no tiene servicios de ayuda a inmigrantes.
Además, el 75 % de los miembros de esas iglesias no participa en proyectos o ministerios de ayuda a inmigrantes o refugiados, a pesar de que un porcentaje similar cree que los cristianos tienen la responsabilidad de ayudar a los inmigrantes, incluso a los indocumentados.
Por otra parte, uno de cada cuatro evangélicos hispanos (27 %) respondió que los inmigrantes recién llegados “perjudican a la cultura” de este país, un porcentaje similar al de evangélicos blancos con esa misma opinión, mientras que el 81 % cree que los inmigrantes no representan nuevas oportunidades para empresas o negocios.
El 90 % de los evangélicos hispanos se declara en contra de la inmigración ilegal y del uso de fondos públicos para servicios para indocumentados, un porcentaje similar al que ve necesario un aumento en la seguridad fronteriza y fijar requisitos más estrictos para la residencia o la ciudadanía.
Soerens señaló que el aumento de evangélicos que creen que “la llegada de inmigrantes presenta un desafío económico o una amenaza a la seguridad” responde a los “problemas muy reales en la frontera entre Estados Unidos y México”, así como al “gran número” de inmigrantes que llega a ciudades “donde legalmente se les prohíbe trabajar, mantenerse a sí mismos y contribuir económicamente”.
“Es importante señalar que las respuestas de ‘amenaza’ y ‘oportunidad’ no son mutuamente excluyentes”, puntualizó.