179.000 puertorriqueños emigrarán a EE.UU. en los próximos diez años

EFEUSA

Alrededor de 179.000 puertorriqueños se esperan que emigren a Estados Unidos entre este año y el 2025, revelaron dos conductoras de un estudio sobre la migración en la isla caribeña, basadas en el estimado de población más reciente de 2016.

Así lo pronosticaron la profesora Elsie Ruiz Santana e Ilia Rosario Nieves, de la Escuela Graduada de Ciencias Sociales y de la Escuela Graduada de Psicología de la Pontificia Universidad Católica de Puerto Rico (PUCPR), respectivamente, en su estudio “El impacto de la migración en Puerto Rico”.

“La emigración seguirá en aumento y seguiremos perdiendo puertorriqueños todos los días”, sostuvo Ruiz Santana durante la presentación, en la que también mencionaron que en la pasada década, emigraron más de un millón de isleños al país norteamericano.

Según los investigadores, al hacer un análisis de la cantidad de gente que se va diariamente, también se percibe un aumento constante.

En el año 2000, unas 157 personas emigraban diariamente a EE.UU., mientras que 15 años después, eran 244.

“Hay que tomar esto como base para crear una política pública para saber cómo puede disminuir”, resaltó la catedrática al mencionar varios factores para la emigración de los puertorriqueños, como los cambios en la estructura económica de la isla, el alza en las tasas de desempleo o excedente de trabajadores.

Otras razones son la amplia oportunidad para viajar en estancias cortas y económicas y la relación política entre Puerto Rico y EE.UU., pues los habitantes de la isla, por ser ciudadanos estadounidenses, poseen el pasaporte estadounidense.

Otros hallazgos del estudio pasan por el hecho de que entre 2005 y 2015, emigraron 761.935 puertorriqueños. En ese mismo tiempo, regresaron 303.859 y otras 53.983 personas de países europeos se radicaron en la isla.

El estudio se basó en una revisión profunda de la literatura sobre migración de diversas fuentes estatales, como el Instituto de Estadísticas, la Junta de Planificación de Puerto Rico, la Universidad de Puerto Rico, el Departamento de Salud, el Registro Demográfico y la Autoridad de los Puertos.

Igualmente, se incluyeron estadísticas de agencias federales, como el Negociado del Censo de Estados Unidos y las Encuestas de la Comunidad del Censo, la Organización de Estados Americanos, la Organización Internacional para las Migraciones y el Departamento de Transporte de Estados Unidos.

Y de acuerdo con Ruiz Santana y Rosario Nieves, el Gobierno de Puerto Rico no cuenta con estadísticas actualizadas sobre el fenómeno, mucho menos políticas públicas para trabajar el mismo.

El mayor grupo de edad de los emigrantes puertorriqueños son niños y jóvenes entre los 5 y 17 años.

Del mismo modo, están emigrando jóvenes en edades productivas, familias completas, en especial de clase media, con algún tipo de ingreso en Puerto Rico antes de partir y que el principal destino de los puertorriqueños a emigrar es en el estado de Florida.

Igualmente, en los pasados años, han aumentado el éxodo de profesionales con bachillerato, maestría y doctorado -22 % de ellos-, mayormente maestros, enfermeras, ingenieros y médicos.

Específicamente, menos de un 25 % de los que emigran a EE.UU., son profesionales, mientras que la ola mayor de emigrantes son familias pobres, con hijos y que dejan atrás a sus adultos mayores.

“Decidimos no adentrarnos en profesiones específicas, porque el Censo y el Instituto de Estadística no cuentan con data tan específica, pero sí sería una buena línea para continuar con el estudio”, reconoció Ruiz Santana.

En el caso de las personas que poseen estudios universitarios -bachillerato, maestría o doctorado- aunque ha habido un incremento, ese crecimiento durante la pasada década ha sido solo de 1 %.

“Debemos explorar otras áreas, otros datos. Realmente sabíamos que los especialistas se van, pero con nuestro recuento histórico, pues hay otras líneas que necesitamos explorar”, abundó por su parte Rosario Nieves.

El aspecto psicológico de la migración es un área poco estudiada, pues las mujeres representan un grupo cada vez mayor de emigrantes, desarrollándose así el concepto de feminización de las migraciones.

En los pasados 40 años, cada vez más mujeres migran de forma independiente en búsqueda de trabajo en vez de como hacerlo como “dependientes”.

En el periodo de 1998-2012, el 56 % de los emigrantes fueron mujeres. Las regiones del Caribe y América Central son las que tienen la proporción más alta con un 61 %.

Entre los años 2002 y 2015, el destino favorito de los emigrantes puertorriqueños fue el estado de Florida. A este le siguieron Pensilvania, Texas y Nueva York.

Texas, por su parte, se ha convertido en el cuarto destino favorito de los emigrantes.

Entre los años 2005 y 2014, el 55 % de los emigrantes estaban matriculadas en escuela superior y sin haber terminado el cuarto año.