Lavandería cierra y deja sin pagos a sus trabajadoras

Una lavandería industrial, RJF Laundry Services, ubicada en la ciudad de Hamilton, Condado de Mercer, dejó impagos a 10 trabajadores hispanos, y se presume también a otros 15 anglosajones. El negocio fue cerrado por la policía local presuntamente por no pagar la renta.

Los trabajadores recibieron cheques sin fondos, el banco les dijo que no había dinero de la compañía y el propietario se ha esfumado luego de prometer que abriría a los pocos días.

La guatemalteca Irma Amado, residente en Trenton, recibió el lunes 31 de marzo su cheque de $ 377 pero cuando fue a cobrarlo al banco le dijeron que la cuenta se había cerrado por lo tanto no podrían pagarle.

“Recibí un cheque de una semana, el que no tenía fondos y me debía el cheque de la primera semana que quedó,” dijo Amado que trabajaba doblando toallas.

RJF Laundry es una compañía que brinda servicios de lavandería de toallas, fundas, sabanas y cobertores de cama a grandes hoteles de Nueva York y algunos hospitales. Esta ubicada en la calle South Gold Drive, en Hamilton.

El lunes último la policía apareció en sus instalaciones de la ciudad de Hamilton, en un área de unos 20,000 pies cuadrados, para clausurarlo. Una de los trabajadoras, Lucila Silva, que solía trabajar empacando toallas limpias para un hotel Hilton de Nueva York, estuvo presente y escuchó decir a los uniformados que “lo cerraban porque no había pagado la renta” del lugar.

Al día siguiente, martes 1 de noviembre, el propietario de la lavandería, Richard J Foster, se apersonó para confiarle a los trabajadores que el jueves 2 de noviembre abriría nuevamente.

“No se preocupen,” les dijo, pero no apareció y hasta el cierre de ésta edición seguía clausurada la lavandería.

Reporte Hispano llamó al teléfono móvil del propietario pero al cierre de ésta edición no devolvía la llamada.

Silva dice que son 8 o 10 trabajadores hispanos los que se han quedado sin cobrar y sin empleo, en total estiman que trabajaban 25 personas. No se pudo confirmar si los trabajadores anglosajones también fueron burlados con los pagos de los salarios.

La mayoría de los trabajadores hispanos, originarios de Guatemala, Honduras y México, recibieron un cheque sin fondos de una semana de trabajo y no recibieron el cheque que se les retiene la primera semana de trabajo.

Zulma Quiroa, de Guatemala, llevaba un año trabajando en la empresa en el área de planchado y conocía el movimiento comercial.

“No me explico porque cerró. Era un lavandería que tenía buenos clientes, como los hoteles, y en las últimas semana habían conseguido un contrato con dos hospitales. Nos hemos enterado que está vendiendo la casa en Nueva Jersey para irse a vivir a Miami. No nos da cara,” declaró Zulma.

La trabajadora recibió un cheque sin fondos por la cantidad de $410. “Fui el Chase Bank y también me dijeron que la cuenta ya no existía” y le quedó pendiente el pago de la primera semana de trabajo. Ahora ha conseguido un trabajo en una factoría cercana, mientras espera que aparezca el propietario para reembolsarle su dinero.