Junta de educación ignora a la comunidad e inicia proceso para vender escuela en New Brunswick
La junta de educación de New Brunswick ignoró los pedidos de estudiantes, padres y miembros de la comunidad que clamaban no vender y cerrar la escuela Lincoln Annex y decidió en su última reunión adoptar una resolución que “recomendará el reemplazo de la actual Escuela Lincoln Annex con una nueva escuela que se construirá en un sitio diferente”.
El documento aprobado con el voto de 6 miembros de la junta a favor y ninguno en contra (dos abstenciones) también recomienda trasladar a los 750 estudiantes de Lincoln Annex a la escuela ubicada en el 40 Van Dyke Ave, mientras que se construye una nueva escuela.
Durante la reunión más de 20 personas, entre ellos estudiantes de la escuela, tomaron la palabra para expresar su rechazo al cierre y venta de la escuela. Pero no todos los que se habían anotado para hablar pudieron hacerlo, ya que los miembros decidieron cerrar la sesión de comentarios públicos, lo cual desató el malestar de los presentes, lo que llevó a que dos personas fueran retiradas de la reunión por los miembros de seguridad.
La escuela Lincoln Annex, que fue remodelada hace apenas 3 años a un costo de 22 millones de dólares, pudiera ser derribada para construir en su lugar un Instituto de Cáncer de la Universidad de Rutgers y Hospital Universitario Robert Wood Johnson .
Tanto las autoridades de la ciudad, la universidad, el hospital y la compañía encargada del proyecto planean comenzar los trabajos de demolición de la escuela este verano.
Aunque afirman que se construirá una nueva escuela para los estudiantes, aún no se tiene definido el terreno en el cual se realizaría la escuela.
El activista comunitario Charlie Kratovil explicó la semana pasada que la ciudad propone construir la nueva escuela en el lote de terreno identificado como 131 Jersey Avenue, un terreno que actualmente se encuentra contaminado. Para poder hacer cualquier construcción en este sitio se requiere una limpieza ambiental que puede durar años, sino décadas.
A esta esuela acuden niños de 4 grado hasta el 8 grado. La gran mayoría de los estudiantes son latinos, el 94%, y el 86% están dentro de la categoría de “económicamente desfavorecido”.
La Diócesis se niega a parar la venta
Por su parte, la Diócesis de Metuchen, que tiene la posibilidad de frenar la venta del edificio donde está ubicada la escuela Lincoln Annex, se ha negado a ayudar a la comunidad.
La Diócesis, quien era el antiguo dueño de esta instalación donde funcionaba una escuela católica, vendió el edificio a la ciudad de New Brunswick con la condición de que el mismo sea utilizado sólo para albergar una escuela por un periodo mínimo de 50 años.
No obstante, la Diócesis ha evitado involucrase en la disputa y demandar que se cumpla la cláusula que esta vigente.
El canal de noticias Univisión mostró en imágenes como el Arzobispo James F. Checchio, encargado de la Diócesis, evitó responder a las preguntas sobre esta cláusula huyéndole a los reporteros en su vehiculo.
En el reportaje de Univisión el reportero señaló que la iglesia evita involucrarse en esta disputa para no perjudicar su relación y negocios con la ciudad, el hospital y la universidad. La educación de los niños y el bienestar de la comunidad pasa a un segundo plano frente a los intereses de estas entidades.