EEUU es el primer país en rebasar el millón de casos

stados Unidos se convirtió este martes en el primer país del mundo en rebasar el millón de casos confirmados de COVID-19, la enfermedad causada por el nuevo coronavirus, según los últimos datos de la Universidad Johns Hopkins, mientras que estados como Georgia, Minnesota y Mississippi empezaron el pasado lunes a reabrir sus comercios en desafío al consejo de expertos médicos.

Desde hace semanas, EE.UU. es el foco de la pandemia en términos absolutos, aunque proporcionalmente la nación más afectada es Bélgica con una tasa de mortalidad del 15,4 %, lo que significa que de 100 personas infectadas, más de 15 pierden la vida.

En EE.UU., la tasa de mortalidad es del 5,7 %, de acuerdo a datos del centro docente.

En total, nueve estados ya empezaron a reabrir partes de su economía (Alaska, Colorado, Georgia, Minnesota, Mississippi, Montana, Oklahoma, Carolina del Sur y Tennessee) y se espera que, en la próxima semana, otros ocho alivien las medidas de cierre de actividades y distanciamiento social.

Todos los estados que están reabriendo tienen varias características en común: la mayoría son rurales, han registrado un número más bajo de contagios que ciudades como Nueva York, epicentro de la pandemia, y suelen ser ideológicamente más conservadores, por lo que reivindican el poder local por encima del federal.

EN GEORGIA SE PUEDE IR A CENAR Y AL CINE, PERO EN MISSISSIPPI NO

Sin embargo, cada estado ha seguido su propio camino y ha elegido qué negocios reabrir y cuáles mantener cerrados.

De esa forma, en Georgia ya está permitido salir a cenar y ver una película al cine, mientras que en Mississippi eso no está permitido y solo han podido abrir sus puertas algunos negocios, pero no todos. Los gimnasios, peluquerías, estudios de tatuajes y salones de belleza siguen cerrados en Mississippi, pero el viernes ya abrieron en Georgia.

Georgia ha tomado las medidas más atrevidas para reabrir la economía, lo que ha hecho que hasta Trump haya criticado al gobernador, el republicano Brian Kemp.

A pesar de la autorización de Kemp, algunos negocios prefirieron mantener sus persianas cerradas. Es el caso de una icónica cadena de restaurantes Chick-fil-A, con sede en Georgia, que ha decidido mantener clausurados los comedores y solo sirve comida para llevar.

La empresa que sí abrió sus instalaciones fue la popular Waffle House, que por primera vez en un mes dejó a los clientes comer dentro de los restaurantes, aunque con varias restricciones: debe haber una distancia de seguridad entre los comensales y no se reparte la lista del menú para evitar que el virus quede en alguna superficie.

OTROS ESTADOS COMO NUEVA YORK SE MANTIENEN CERRADOS

Frente a esa tendencia, los estados más golpeados por la pandemia, como Nueva York, Nueva Jersey, Michigan y Massachusetts permanecen cerrados y llevan semanas reclamando a la Administración Trump que aumente el número de pruebas disponibles para detectar el virus.

A pesar de la precaución, el gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, tiene previsto comenzar la reapertura el 15 de mayo en un proceso por fases que empezará por las zonas geográficas menos afectadas y por sectores como la construcción y la industria manufacturera. 

La crisis sanitaria está ocasionando un grave deterioro de la economía de Estados Unidos, cuyo déficit fiscal se triplicará hasta alcanzar los 3,7 billones de dólares al término del año fiscal 2020, mientras que el desempleo se prevé que alcance el 16 %, según estimaciones de la Oficina de Presupuesto del Congreso de EE.UU.