Exembajador se declara culpable de cargos de espionaje para Cuba
El exembajador estadounidense Víctor Manuel Rocha, arrestado en Miami en diciembre pasado y acusado de varios cargos criminales relacionados con fraude y espionaje para Cuba durante 40 años, anunció en una corte de Miami que se declarará culpable.
Rocha, de 73 años, señaló que admitirá su culpa de los cargos federales en su contra por conspiración para actuar como agente de un Gobierno extranjero, después de haberse declarado el pasado 14 de febrero no culpable de los cargos que pesaban en su contra.
El cambio de declaración de Rocha y la audiencia para sentencia fue fijada para el próximo 12 de abril, según documentos judiciales a los que tuvo acceso EFE.
El exdiplomático de origen colombiano fue embajador de EE.UU. en varios países de Latinoamérica y está acusado de “cometer múltiples crímenes federales al actuar secretamente durante décadas como agente del gobierno de la República de Cuba”, según la acusación del Gobierno estadounidense.
Preguntado en la vista judicial por la jueza de distrito Beth Bloom si deseaba cambiar su declaración previa de no culpabilidad, Rocha dijo:” Estoy de acuerdo”.
Rocha afronta un total de 15 cargos por 6 delitos, que en conjunto le acarrearían una pena máxima de cárcel de 60 años si es declarado culpable.
Entre los cargos hay uno por “actuar como agente ilegal de un Gobierno extranjero (Cuba)” y otro por conspiración de ese mismo crimen y “defraudar a Estados Unidos”.
También tiene cinco cargos por fraude electrónico, tres por “hacer una declaración falsa en una solicitud de pasaporte”, cuatro por “uso de un pasaporte obtenido mediante una declaración falsa” y uno por “declaraciones y representaciones falsas”, según el documento de la acusación.
El exembajador está acusado de cometer múltiples delitos federales al actuar de forma secreta durante unos cuarenta años como “agente del Gobierno de la República de Cuba”, según EE.UU.
Rocha fue arrestado en Miami el pasado 1 de diciembre después de confesar sus actividades a un agente del FBI que se hizo pasar por otro espía cubano.
Entre 1981 y 2002, Rocha fue empleado del Departamento de Estado de EE.UU. y ocupó varios puestos en las embajadas de Estados Unidos en República Dominicana, Honduras, México, Argentina y Bolivia.
Según consta en el escrito de acusación, entre 2022 y 2023 hubo tres reuniones entre Rocha y un agente especial del FBI que fingió ser “Miguel”, un representante de la Dirección General de Inteligencia de Cuba.
En esos encuentros, que fueron grabados y se llevaron a cabo en español, el exdiplomático se refirió constantemente a Estados Unidos como “el enemigo” y confesó que su mayor preocupación cuando trabajaba para el Departamento de Estado fue “fortalecer la Revolución” cubana.