Latinas entran a la masonería en NJ

La masonería se ha resistido desde sus inicios a admitir mujeres entre sus miembros, y aún hoy 13 estados de La Unión Americana no tienen miembros mujeres, y la colombiana Liliana Cermeño, masón desde hace tres años, está entre las primeras admitidas en Nueva Jersey.

“Me siento contenta y halagada de saber que podemos generar un pensamiento de reconciliación de género y una posibilidad de compartir, dentro de un grupo de masones, sentimientos y conocimientos,” dice Liliana

Admite que muchas logias no aceptan mujeres pero respeta ese modo de pensar “porque personas que fueron criadas de cierta manera, no admiten de pronto ciertas posibilidades, ciertos pensamientos”

Y señala que se afilió a la masonería porque representa un nuevo estilo de vida. “No es nada fuera de éste planeta o fuera de éste mundo. Me parece algo interesante y con el cuál yo me identifico porque hay un gusto por las artes, por la literatura, por la investigación, que me ayuda a superarme como ser pensante,” recalca.

Contra lo que se cree, ella dice que los masones creen en un ser superior que rige el universo “Lo principal de todo es que creemos en Dios y si creemos en Dios hay amor y hay fraternidad,” anota.

Ella pertenece a la Gran Logia Hispana Mixta de Nueva Jersey, creada en el 2012, siendo la única logia hispana en los Estados Unidos, pero acoge en su seno a otras 14 logias de distintas partes del mundo.

Uno de los artífices de ésta apertura es el titular de la logia, El Gran Maestre Benjamin Sabido, médico mexicano con práctica en el Condado de Hudson.

“En Estados Unidos se acostumbró, por tradición, a segregar a la mujer de sus filas. Si se habla de igualdad hay que darle iguales derechos a la mujer en nuestras filas,” dice el Dr. Benjamín Sabido.

Asimismo promueve el ingreso a la masonería a las personas mal llamadas discapacitadas, porque muchas de ellas, no obstante sus limitaciones físicas, son genios en su rama como el físico Stephen Hawking que no puede caminar ni hablar, como el genial músico Ludwig van Betthoven que era sordo, como la profesora Hellen Keller, que era sorda y ciega

El Gran Maestre dice que hoy la masonería vive otra época, ya no se concentra en preparar o estimular a reyes, príncipes, políticos o revolucionarios para tomar o ejercer poder y liderazgo sino revolucionarios a gobernar el mundo, ahora está enfocada en mejorar a la persona humana, como individuo.

Añade que aún conservan los ritos de iniciación que se formaron en el inicio de los tiempos y aún cuando el ingreso a ésta sociedad secreta ahora es más flexible, incorporan, por invitación, sobre todo a personas con moral intachable y que cuenten con recursos propios.

Pero sostiene que en su logia no son bienvenidos los ateos “porque que para acogerse a los principios de libertad de pensamiento, derechos humanos y el perfeccionamiento individual, la persona debe tener una fe,” finaliza.