Precaución con los préstamos universitarios
Los jóvenes que se endeudan para ir a la universidad tienen que andar con pies de plomo porque no solamente pueden sufrir el dolor de cabeza para conseguir esos prestamos sino que pueden empeñar su futuro y el de sus familiares si entran en una espiral desenfrenada de pagos que nunca se podrán cancelar.
Así los hizo saber la especialista en asesoría de estudiantes Zakiyyah Wiley notando que “en lo que va del 2014 los prestamos de estudio se han convertido en la segunda deuda más importante de los residentes estadounidenses solamente superada por las hipotecas de las casas, y con el precio de la educación universitaria aumentando de 6 a 10 por ciento cada año hay una señal de peligro que hay que atender,” dijo.
Entre los peligros que ve la analista encuentra que los padres y los hijos hispanos, que a menudo asumen la deuda conjuntamente, pueden ver perjudicados a futuro sus planes de jubilación o sus planes de ahorrar para comprarse una vivienda, por los altos costos del préstamo.
Por eso recomienda planificar desde los primeros años de la vida escolar de sus hijos. “Lo más efectivo es comenzar un plan de ahorro semanal desde que el niño o joven entra a la escuela preparatoria, preferible guardar el dinero en un banco, y hacerse la promesa de no tocarlo para nada” dice Wiley
Además recomendó a los estudiantes hispanos que no caigan en ¨locuras juveniles¨ que manchen su hoja de antecedentes criminales, que les puede impedir recibir una ayuda crediticia, si la llega a necesitar.
“Si, también es básico mantener una buena conducta ciudadana, un mancha en el expediente legal puede ser fatal, sobre todo si somos hispanos o afroamericanos, como yo. El perfil racial aún existe en muchos lugares,” externó Wiley.
Otra estrategia pasa por inculcarle que tenga buenas notas, arriba de 3 en el GPA (promedio ponderado en el High School) que le permitirá acceder a becas anuales que le pueden financiar los estudios.
La michoacana Silvia Huerta, estudiante egresada de Perth Amboy Hichg Scholl y que recibió una beca de 95,000 dólares de la fundación Jack Kent Cooke, que le permite pagar sus estudios de leyes en la universidad de Pensilvania, es un buen ejemplo para ello.
Por el momento los estudiantes hispanos de bajos recursos pueden aplicar para las becas del programa The Dream US, que pide un mínimo de promedio ponderado del orden de 2.5 en las calificaciones para los egresados de la preparatoria o secundaria.
Además ayuda a los estudiantes que ya están cursando una carrera universitaria. En Ambos casos las becas les pagan el total de la carrera,
Este programa tiene 23 millones de dólares de fondos habiendo otorgado a la fecha su ayuda a 330 estudiantes y tiene como fecha límite para aplicar el 26 de octubre próximo.
Para enterarse de los requisitos, acceder a la aplicación y someter la forma deben ir a la web: www.thedream.us No pierda tiempo.