Robert Menéndez sostiene que se ha comportado “de acuerdo con la ley”

El senador hispano de Nueva Jersey, Robert Menéndez afirmó que siempre se ha comportado “de acuerdo con la ley” y aseguro que él y el multimillonario dominicano Salomon Melgen son “verdaderos amigos por más de dos décadas”.



El político hispano, de origen cubano, brindó sus primeras declaraciones a los periodistas, en el aeropuerto de Newark, tras conocerse que el Departamento de Justicia iba a presentar cargos criminales por corrupción en su contra.



Las informaciones difundidas por varios medios indican que el influyente legislador supuestamente usó su oficina en el Senado para impulsar los intereses empresariales de Melgen, quien vive Florida.



Menéndez compareció ante los periodistas para leer una declaración, primero en inglés y luego en español, con mínimos cambios, pero dijo que, ya que “hay una investigación en curso”, no podía extenderse al respecto ni responder preguntas.



“Aunque me gustaría, no puedo hacer ningún comentario adicional. Espero que ese momento llegue, y cuando llegue tomaré la oportunidad”, agregó el legislador.



Robert Menéndez, miembro del Comité de Relaciones Exteriores del Senado, recordó que ha acumulado el “privilegio” de trabajar por 23 años en el Congreso. “Cualquiera que me conoce sabe que yo lucho por las cosas que son importantes”, agregó.



Citó sus posturas para ayudar a las víctimas de la tormenta Sandy, de los atentados del 11S y también para que “Irán nunca alcance la capacidad de producir armas químicas o nucleares”, entre otros temas.



Respecto a Melgen, insistió en que tanto él como sus respectivas familias han sido “verdaderos amigos durante más de dos décadas”, han compartido vacaciones, bodas y funerales, y se han intercambiado regalos “como lo hacen los amigos”.



El Departamento de Justicia no ha confirmado oficialmente la existencia de la investigación. “No puedo comentar sobre eso”, dijo el secretario de Justicia, Eric Holder, preguntado por los periodistas.



La investigación del Departamento de Justicia, abierta desde hace meses, se centra en la relación del legislador con Melgen, un oftalmólogo que es amigo de Menéndez y que ha hecho donaciones al senador y a comités asociados con él.

Los cargos apuntan a que el senador defendió a Melgen ante administradores del plan federal de seguros médicos para mayores de 65 años Medicare, que habían acusado al oftalmólogo de cobrar facturas excesivas al Gobierno bajo ese programa, según la cadena de televisión, que cita fuentes cercanas a la investigación.



Los investigadores también han examinado si Menéndez violó la ley al tratar de ejercer presión sobre el Gobierno de la República Dominicana para que cumpliese un contrato con la compañía de seguridad portuaria que posee Melgen.
En ese momento, la agencia de Protección y Control de Aduanas de EE.UU. consideraba donar equipos de seguridad portuaria a la República Dominicana, lo que habría puesto en peligro el contrato que tenía la empresa de Melgen.



Además, en 2010, Menéndez viajó dos veces a la República Dominicana como invitado de Melgen, y tres años más tarde, cuando salió a la luz que no había declarado esos desplazamientos, reembolsó al médico 58.500 dólares por los gastos del viaje.



Menéndez fue presidente del Comité de Relaciones Exteriores del Senado hasta enero de este año, y es uno de los legisladores más activos en la política de EE.UU. hacia Latinoamérica.

De confirmarse la investigación en contra del político hispano y de llegar a ser encontrado culpable, Menéndez pudiera pasar a integrar la lista de senadores del Estado que han caído en desgracia.

El primer senador de Nueva Jersey investigado por el gobierno federal fue Harrison Williams, a principios de los 80. Williams fue hallado culpable de aceptar sobornos y conspiración, lo que lo obligó a renunciar a su cargo en 1982. Fue sentenciado a tres años de prisión. El otro senador que integra esta lista es Robert Torricelli, quien durante su campaña de reelección al senado en el 2002 se reveló que había recibido contribuciones ilegales. Esto obligó al senador a renunciar a su cargo.