“Jurassic World” revive la saga
El carisma y atractivo de Chris Pratt, que el gran público empezó a adivinar en “Guardians of the Galaxy”, explotan definitivamente en la esperada “Jurassic World”, una película que, según dijo el actor funciona como tributo al cine de Steven Spielberg.
Han pasado 22 años desde que el rey Midas de Hollywood dejara boquiabierto al mundo entero con “Jurassic Park” (1993). Tras ese éxito, los dinosaurios dieron más guerra en “The Lost World: Jurassic Park” (1997) y “Jurassic Park III” (2001). Ahora, de la mano de Colin Trevorrow (“Safety Not Guaranteed”), “Jurassic World” se presenta como uno de los estrenos más esperados del año.
Spielberg, que aquí ejerce como productor ejecutivo, “creó un frenesí increíble para toda una generación con ‘Jurassic Park’ y su marca está muy presente en esta nueva entrega”, explicó Pratt.
“La acción y la relación entre los protagonistas recuerda a Indiana Jones, igual que el suspense recuerda a ‘Jaws’”, manifestó el actor de 36 años.
“La película es un gran homenaje al cine de Spielberg. En ese sentido, él estuvo muy presente. Pero eso nunca eclipsó el trabajo de Colin. Es totalmente su obra”, agregó.
“Jurassic World” es un centro turístico de lujo donde los visitantes interactúan con criaturas prehistóricas en su propio hábitat, pero los asistentes se ven sumidos en una pesadilla cuando un animal modificado genéticamente escapa y amenaza con destruir todo a su paso, algo que deberá impedir el exmilitar experto en comportamiento animal al que encarna el actor.
Pratt, amante de la caza en la vida real, fue contratado como el héroe de la historia cuando aún no se habían estrenado ni “The Lego Movie”, la cinta de animación más exitosa del año pasado en EEUU, ni “Guardians of the Galaxy”, la tercera película de mayor recaudación en todo el mundo en 2014, que lo han convertido en un auténtico imán para la taquilla.
“Lo vi como una gran oportunidad para mí”, confesó Pratt. “El guión era genial, confiaba en el director y deseaba formar parte de una franquicia que ha significado mucho para mí”, indicó el actor, que dejó claro que no se hubiera involucrado en el proyecto si la historia no merecía la pena.
“No quería algo forzado y hecho exclusivamente para hacer dinero”, reconoció el actor, para quien el “factor emocional” de la historia, que incorpora elementos clásicos de la cinta original, juega un papel decisivo.