Eugenio Derbez agradece apoyo y habla de su próxima película
En México es una toda una personalidad y Hollywood tendrá una estrella con su nombre, pero el actor Eugenio Derbez tiene “los pies plantados en la tierra” y quizá por ello habla con aplomo de sus retos en el cine así como de los desafíos que afrontan los latinos en Estados Unidos.
Hispano prominente y voz latina muy reconocida en Estados Unidos, Derbez ve ya a la vuelta de la esquina el estreno de “Miracles from Heaven”, una cinta de inspiración religiosa en la que comparte escenas con Jennifer Garner y Queen Latifah y que relata la milagrosa e inexplicable curación de una niña con una grave enfermedad digestiva.
A las órdenes, de nuevo, de la cineasta mexicana Patricia Riggen (“La misma luna”), una experiencia que el actor considera como “una máster class (una clase maestra)”, Derbez interpreta al doctor Nurko, un médico mexicano que existe realmente y que es todo un experto en su campo.
“Normalmente (a los latinos) siempre nos toca interpretar al narcotraficante, el criminal o, en el mejor de los casos y si es buena gente, el cocinero o el ‘valet parking’ (aparcacoches)”, apuntó con ironía Derbez.
“Entonces, interpretar ahora a una eminencia a nivel mundial, doctor de Harvard, pues para mí fue un regalo y va a ser un regalo para la comunidad cuando vea en el cine que este doctor es un latino”, añadió.
Forjado en la televisión y la comedia en México antes de dar el salto a Estados Unidos, Derbez es un artista que no sólo cruzó la frontera geográfica, sino que también selló su pasaporte artístico en Hollywood con el tremendo éxito de la película “Instructions Not Included” (2013). “Esa película marcó un antes y un después en mi vida y en mi carrera. Creo que no va a haber algo que marque más mi destino en general que esa película”, argumentó.
A ese filme también le atribuye gran parte del mérito de que el Paseo de la Fama de Hollywood desvele una estrella en su honor.
“Nerviosísimo”, “emocionado” y todavía sin creérselo del todo, Derbez aseguró con humor que está “feliz” de quedar “plasmado de por vida” y de que le “vayan a pisar” todos los que caminen por la legendaria avenida de Hollywood Boulevard.
Afincado ahora en Los Ángeles, Derbez opinó también sobre los premios Óscar y señaló que si se quiere hablar de diversidad no puede quedarse “en dos bandos”, de blancos y negros, sino que se debe incluir “a todos”. Y es que aunque la meca del cine “está empezando a reconocer que hay talento más allá de las fronteras de EEUU”, como demuestran los recientes triunfos en los Óscar de los mexicanos Alejandro González Iñárritu o Emmanuel Lubezki, el actor consideró que los latinos todavía tienen camino por recorrer.
Sin perder la sonrisa, pero hablando con tono decidido, no sorprende que Derbez defienda con firmeza a una comunidad y un público latino que, en su opinión, son los responsables de que él pudiera aterrizar y triunfar en Estados Unidos.
Al echar la vista atrás, el intérprete contó que quiso convertirse en actor porque se enamoró de la profesión de su madre, también actriz, e indicó que tal vez por eso siempre ha llevado bien la popularidad, ya que de niño era habitual que su madre “provocara tumultos cuando salía a la calle” y sus seguidores le pedían autógrafos y fotografías.
Pero Derbez también mira hacia el futuro y ya piensa en una nueva película, “How To Be a Latin Lover”, en la que se pondrá en la piel de “un vividor” y “un ‘latin lover’ en decadencia”.
Además, explicó que la vida le da lecciones “todos los días” y que dijo que tiene “un imán” para que le pasen cosas extrañas que luego intenta plasmar en sus historias.
“Yo me quise retirar hace diez años, porque pensaba que había llegado al final de mi carrera, y estos diez años últimos han sido los más impresionantes de mi vida”, señaló Derbez “Para mí, (la actuación) no es un trabajo: es un placer levantarme y trabajar”, finalizó.