Exámenes de detección del cáncer colorrectal para los hispanos: se trata de prevención, no solo de detección
Una prueba de detección pudiera no solo descubrir el cáncer a tiempo sino también evitarlo, ¿tendría usted alguna razón para no hacerse esa prueba?
Todos los exámenes de detección de cáncer que se usan extensamente tienen el objetivo de detectar el cáncer a tiempo, cuando el tratamiento puede tener más éxito. Pero varias pruebas de detección pueden también ayudar a encontrar células anormales que no se han convertido todavía en cancerosas, lo que permite que se extirpen antes de que causen problemas. Las pruebas de detección de cáncer colorrectal, es decir, en el colon y recto, pueden ayudar a detectar formaciones precancerosas que se llaman pólipos. Al extraer estos pólipos se impide que se conviertan en cáncer.
La buena noticia para los hispanos es que ellos tienen una incidencia más baja de cáncer colorrectal que la mayoría de los grupos raciales o étnicos de los Estados Unidos. Aún así, casi 11 000 nuevos casos de cáncer colorrectal se diagnostican en hispanos estadounidenses cada año. Y, aunque los índices de cáncer colorrectal, en general, están bajando en los Estados Unidos, los índices en los hispanos están disminuyendo más lentamente que los índices de estadounidenses blancos no hispanos. Los hispanos tienen también más probabilidad que los blancos no hispanos de ser diagnosticados cuando el cáncer colorrectal es avanzado y, por lo tanto, menos tratable.
Aunque hay muchos factores detrás de estas desigualdades, uno que es importante es que los hispanos tienen menos probabilidad de hacerse examinar para cáncer colorrectal que los blancos no hispanos. Por ejemplo, en 2010, solo 47% de hombres y mujeres hispanos mayores de 50 años se habían hecho examinar recientemente para cáncer colorrectal en comparación con 62% de los estadounidenses blancos.
Una encuesta grande llevada a cabo en el 2005 por el Instituto Nacional del Cáncer, llamada Health Information National Trends Survey, encontró que muchos hispanos estadounidenses no saben que, cuando el cáncer de colon y de recto se encuentra temprano, los índices de supervivencia son buenos. De hecho, la cirugía puede curar cerca de 90% de las personas con cáncer colorrectal en etapas iniciales.
Hay varias opciones eficaces de exámenes de detección para el cáncer colorrectal, lo que significa que usted puede encontrar una prueba que se ajuste a su riesgo, a sus preocupaciones y a su nivel de conveniencia. Al saber sus opciones, puede ser más fácil para usted pedirle más información al médico.
Colonoscopia y sigmoidoscopia: Para estas pruebas, el médico usa un instrumento luminoso, flexible, para revisar físicamente el colon y extirpar cualquier crecimiento anormal.
La colonoscopia examina el recto y todo el colon. Su doctor le dará laxantes especiales para que se los tome antes del procedimiento para que su colon esté limpio. Durante una colonoscopia, generalmente a usted se le dará un sedante (es decir, un medicamento para que esté dormido o muy relajado durante el procedimiento). Las pautas actuales recomiendan que la gente que tiene un riesgo promedio de cáncer colorrectal se haga una colonoscopia cada 10 años.
La sigmoidoscopia revisa el recto y la parte inferior del colon (colon sigmoide). El colon inferior debe estar limpio antes de la sigmoidoscopia, pero la preparación es menos complicada que la que se requiere para una colonoscopia. Usted generalmente no necesita sedación para una sigmoidoscopia. Las pautas actuales recomiendan que la gente que tiene un riesgo promedio de cáncer colorrectal se haga una colonoscopia cada 5 años (y pruebas de sangre oculta en la materia fecal cada 3 años).
Prueba de sangre oculta en la materia fecal/análisis inmunológico de sangre oculta en la materia fecal (FOBT/FIT), también conocida como prueba fecal. Para esta prueba, el médico le da un un paquete para que recoja una o más muestras de materia fecal en su casa. Las muestras se envían al consultorio del doctor o al laboratorio para hacer pruebas de presencia de sangre. Algunas personas prefieren la prueba fecal porque se hace en privado, no es cara, no requiere que se tomen laxantes y se hace con facilidad. Las pautas actuales recomiendan que la gente que escoge hacerse la prueba fecal se haga la prueba cada año.
La mayoría de las pautas recomiendan que la gente que tiene un riesgo promedio de cáncer colorrectal empiece a hacerse los exámenes de detección a los 50 años y continúe hasta los 75 años de edad. Si usted tiene más de 50 años y nunca se ha examinado para el cáncer colorrectal, hable con su proveedor de servicios médicos para saber cuál de esas pruebas de detección le conviene más. Usted puede también preguntar acerca de los cambios de estilo de vida que pueden reducir su riesgo de esta enfermedad. Si alguien en su familia ha tenido pólipos o cáncer colorrectal, es posible que usted necesite empezar a hacerse los exámenes de detección antes de los 50 años de edad. Una vez más, su proveedor de servicios médicos es donde debe empezar.
El hecho de no tener seguro médico puede hacer que la gente no se haga los exámenes de detección. Si usted no tiene seguro médico o su seguro es muy limitado, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades tienen un programa en 25 estados que proporciona servicios de exámenes de detección de cáncer colorrectal a hombres y mujeres de bajos ingresos de 50 a –64 años de edad. Se puede encontrar más información sobre este programa en http://www.cdc.gov/spanish/cancer/dcpc/about/crccp.htm. De acuerdo con la Ley del Cuidado de Salud todos los planes en el mercado de seguros médicos y muchos otros planes deben ofrecer cobertura para los exámenes de detección del cáncer colorrectal para personas mayores de 50 años sin cobrar copago o coseguro.
Para obtener más información sobre el cáncer colorrectal, visite el sitio web del Instituto Nacional del Cáncer (NCI) en www.cancer.gov/espanol/tipos/colorrectal o llame al 1-800-422-6237 (1-800-4-CANCER).
El Instituto Nacional del Cáncer, NCI, dirige el Programa Nacional de Cáncer y el esfuerzo de los Institutos Nacionales de la Salud (NIH) para reducir significativamente la prevalencia del cáncer y mejorar las vidas de los pacientes con cáncer y de sus familias, por medio de la investigación sobre prevención y biología del cáncer, la creación de nuevas intervenciones y la capacitación y mentoría de nuevos investigadores. Para obtener más información sobre el cáncer, visite el sitio web del NCI en www.cancer.gov/espanol (o m.cancer.gov/es desde su dispositivo móvil) o llame al Servicio de Información sobre el Cáncer del NCI al 1-800-422-6237 (1-800-4-CANCER). Más artículos y videos de Líneas Vitales, una serie culturalmente relevante, se encuentran en www.cancer.gov/espanol/cancer/lineas-vitales.