Policía de Tennessee quiere mejores relaciones con latinos

El Departamento de Policía de Chattanooga está poniendo en práctica una serie de nuevas iniciativas y programas enfocados a mejorar sus relaciones con las comunidades latinas e hispanas.

De acuerdo con informes publicados, sólo ocho de 470 trabajadores que han tomado juramento están certificados como intérpretes de español. Hasta fines del año pasado había sólo 13 policías hispanos.

“Cuando llaman al número de emergencias 911 o cuando piden ayuda, a menudo no hay intérpretes, nadie entiende lo que están diciendo”, dijo Stacy Johnson, directora ejecutiva de La Paz, un organización sin fines de lucro que defiende a la comunidad latina local. “Eso se convierte en una enorme barrera que evita que la población latina tenga contacto con la policía”.

La Agencia de Investigación de Tennessee reporta que los delitos contra las comunidades hispana y latina en el condado Hamilton aumentaron 22% en 2013 y 2013.

Muchos residentes se resisten a reportar los delitos, ya sea porque residen en el país sin permiso o porque temen que la policía sea corrupta.

“Tienen miedo de llamar o no están seguros del proceso”, dijo Johnson, quien agregó que la policía alguna vez tuvo programas enfocados a educar a la comunidad latina, pero ha dejado de usarlos desde hace años.

Sin embargo, el departamento espera calmar las preocupaciones con iniciativas dirigidas a restablecer un entendimiento cómodo entre la creciente población hispanohablante de Chattanooga y la policía, en la que predominan agentes blancos y negros.

Un programa es la academia policial en español, un curso de ocho semanas que da a los participantes una amplia explicación de cómo trabaja la policía. El departamento también ofrece cursos gratuitos de español a sus empleados.

Adicionalmente, el departamento trabaja con la universidad comunitaria estatal de Chattanooga para lanzar un programa llamado RISE (Educación de seguridad para refugiados e inmigrantes, por sus siglas en inglés), para dar equipamiento y educación especial a refugiados e inmigrantes. El jefe de la policía, Fred Fletcher, creó un programa de inmersión que solicita a los cadetes estudiar minuciosamente a las comunidades minoritarias.

“En cada iniciativa se trata de aprender y apreciar la cultura”, dijo Fletcher.

Lesly Vicente aprecia el esfuerzo. En 2012 tres ladrones enmascarados robaron el efectivo de la tienda que poseen ella y su esposo.

Vicente dijo que uno de los policías que llegaron hablaba un poco de español y eso ayudó a que aumentara su confianza en la policía. “Por lo que pasamos con ellos”, dijo.