Jersey City se suma a ciudades que castigan a malos empleadores

El concilio municipal de Jersey City se puso la camiseta de los trabajadores del estado al aprobar una ordenanza que penaliza con el retiro de la licencia de funcionamiento a aquellos negocios o compañías que no paguen completo o parte de los salarios a sus trabajadores.

Comenzando con el Presidente del Concilio Rolando R. Lavarro, Jr., quien fue ponente de la ordenanza, los concejales Daniel Rivera, Joyce Watterman, Frank Gajewski, Khemraj “Chico” Ramchal, Richard Boggiano, Michael Yun, Candice Osborne y Diane Coleman, votaron sin que les tiemble la mano.

Fue una auténtica goleada: 9 a favor, ninguno en contra. Y los aplausos invadieron el recinto.

Bajo la ordenanza, el empleador ha cometido el robo de salarios cuando una audiencia administrativa o judicial lo encuentre responsable de violar las leyes federales, estatales o locales que regulan el pago de los salarios.

“Un salario mínimo proporciona poca protección para las familias trabajadoras si los empleadores pueden robar los salarios con impunidad”, dijo Louis Kimmel, de la organización New Labor, uno de los impulsores de la ordenanza.

Uno de los más entusiastas con la aprobación es el ecuatoriano Diego Cazar, activista de New Labor, quien fue víctima de robo de salarios.

“ Yo trabajé en una escuela de judíos, en Lakewood, pero el mes previo a la venta de la escuela, el propietario me dijo que no me iba a pagar y que se lo reclame al nuevo dueño. Pero éste me dijo que no me podía pagar porque no había trabajado para él. Se quedaron con dos mil dólares de mi trabajo. Espero que esto no suceda más,” anotó Cazar.

Olga Morales, colombiana que dijo haber trabajado para la agencia de empleos VIP como “homemaker” durante ocho meses en distintas ciudades, también la dejaron sin el salario del último mes en la compañía que trabajaba. En su opinión, esta ordenanza beneficiará a las ciudades.

“Primero que las ciudades no van a tener niños en situación de necesidad que hay que cuidar y socorrer porque sus padres van a tener dinero para mantenerlos” anotó Morelos, que agregó que las ciudades “van a tener habitantes más tranquilos, seguros, confiados porque sabrán que el fruto de su esfuerzo será debidamente recompensado”.

Lavarro, presidente del Concilio, dijo en una conferencia de prensa previa a la sesión municipal, que dicha ordenanza es una medida de seguridad contra aquellos empleadores que no se apegan a las leyes y que podría costarle la suspensión de la licencia de funcionamiento de su negocio.

“Esta ordenanza detendrá a aquellos empleadores que engañan a sus trabajadores con los salarios que les han prometido, en contra de sus competidores que sí son responsables y siguen la ley y las reglas del juego”, dijo Lavarro.

El legislador local comentó que ésta ordenanza se aprueba en beneficio del mejor interés de la ciudad de Jersey City, que patrocina políticas laborales con visión de futuro en el afán de proporcionar seguridad para las familias trabajadoras y fortalecer su economía local.

La última ciudad que aprobó una ordenanza similar fue Newark, sumándose de esa manera a localidades como New Brunswick, Princeton y Higland Park.