400 mil niños no tendrán que comer mañana en Nueva Jersey

Juan Carlos Ramírez tiene más de 60 años, es mexicano y realiza trabajos eventuales de construcción, no tiene papeles y a veces recurre a la llamada Iglesia Presbiteriana Hispana, en Paterson, para conseguir una comida caliente o unos bocadillos los fines de semana. “Cualquier ahorro es bueno,” dice mientras le hecha mostaza a unos perros calientes.

Ramírez no quiere hablar más, y se retira a una esquina para dar cuenta de sus bocadillos.

Calixto Buendía, del Ecuador, primera vez que aparece por el lugar y como le dijeron que la comida era gratis se puso en la línea a esperar su turno. “Es la primera vez que vengo, si es gratis ¿porque no?. Llena el estomago y pues digamos que a caballo regalado no se le mira el diente,” dice.

Más adelante una señora hispana se aparta del grupo y se sienta en los escalones de la iglesia para recibir su comida. Su niña también comparte.

En ésta iglesia se reparten comidas los sábados y domingos, de manos de los voluntarios de una organización religiosa coreana, Pilgrim Church.

Entre los asistentes hay muchos hispanos, blancos y afroamericanos, pero se ve un número mayor de adultos. Erick Díaz coordinador del programa CSFP para adultos de 60 años en Food Bank de Nueva Jersey, dice que en su programa, que asiste a 3,200 personas en diversas ciudades del estado, más del 50% son hispanos.

“Esto lo vemos en las ciudades de bajos ingresos como Newark, Paterson, Jersey City, Elizabeth, tanto en adultos como en niños, estos últimos en éste momento preocupan mucho a nuestra organización” dice Díaz.

Food Bank, una organización que desde 1982 empezó a repartir alimentos en el barrio de Ironbound, en Newark, provee alimentos a personas en necesidad en todo el estado de Nueva Jersey, en los últimos años ha detectado mucha necesidad de alimentos en los niños del estado.

Un informe preparado por Laura Sodano, de la misma organización, da cuenta que en Nueva Jersey 1 de cada 5 niños se van a ir a la cama sin saber si al día siguiente tendrán para comer. Eso representa unos 400 mil niños que pasarán hambre el día de mañana.

No hay estadísticas por etnia, raza o comunidad, pero se sospecha que el número de niños hispanos es alto, por el mismo motivo que en los mayores de 60: porque viven en ciudades de paupérrimos ingresos.

A pesar de que en el último año Food Bank ha repartido 44,6 millones de libras de alimentos en las ciudades más pobres del estado se quedan cortos.

“No tengo los número de cuanto más necesitamos, pero la necesidad es mucha” anota Díaz. “Nos pueden llamar o visitar en la web tanto si son familias que necesitan alimentos como si son donantes”.

Food Bank reparte alimentos gratis a través de una red de iglesias u organizaciones alrededor de Nueva Jersey

Una buena fuente de donativos son los alimentos que le faltan días o semanas para su vencimiento, aclara Díaz, todo es cuestión de ver el tipo o calidad de alimentos.

Actualmente 41 compañías como Dunkin Donuts, BJ’s Whole Sale Club, Stop & Chop, Shop Rite, Walmart, WAWA, Newman’s Own, y financieras como Bank Of America, Wells Fargo Bank, Capital One, entre otros, ayudan con donativos en alimentos o en efectivo para sostener éste programa de alimentos gratuitos en el estado.

Interesados en donar o recibir ayuda pueden llamar al 908-355-3663 o escribir a lsodano@cfbnj.org