Latinas son las más propensas a pensamientos suicidas
Las adolescentes latinas son el grupo más propenso a intentar suicidarse o tener pensamientos suicidas, lo que podría estar relacionado con barreras culturales y desventajas socio-económicas, de acuerdo a expertos.
“Las adolescentes latinas tienen la tasa de intento de suicidio más alta de todos los grupos étnicos y géneros, debido a significativas desventajas socioeconómicas y mayor prevalencia de factores de riesgo”, dijo Jagdish Khubchandani, profesor de Ball State University y autor de un reciente y extensivo estudio sobre el tema.
El experto agregó que entre esos factores de riesgo figuran enfermedades mentales, un nivel socioeconómico bajo, estatus migratorio, estrés por aculturación y conflictos familiares, entre otros.
Resaltó que para entender mejor el riesgo de que estas jóvenes caigan en conductas suicidas, es necesario no solo identificar los factores de riesgo sino ver cómo les afectan.
“En el caso de las jóvenes latinas, encontramos que las conductas suicidas están asociadas a síntomas depresivos como resultado de no tener resueltas sus necesidades de salud mental y estrés; o en otros casos debido a amenazas o maltrato por parte de los compañeros de escuelas” por discriminación sexual o racial, señaló.
Otra causa analizada por Khubchandani fue el abuso sexual, que podía provocar un mayor riesgo de culpa, vergüenza y autolesiones, así como incurrir en patrones sexuales de mayor riesgo.
El investigador señaló que a todo ello se suma el hecho de que muchas jóvenes de esta minoría son reacias a buscar ayuda y, por ende, las hace más vulnerables que otros grupos.
De acuerdo a Khubchandani, es importante que las familias latinas conozcan el riesgo al que están expuestas estas jóvenes y comprendan la realidad “bicultural” en la que se desenvuelven para que puedan intervenir antes de que sea demasiado tarde.
“En muchos casos, las tradiciones culturales y familiares hispanas instan a las mujeres a ser pasivas, recatadas y a asumir más responsabilidades para tener una familia más armoniosa y unida, lo cual se contrapone al sistema de valores en el que se desenvuelven y (ello) genera conflicto”, aseguró el investigador.
Para Susan M. De Luca, profesora de University of Texas con más de 15 años de investigación sobre el tema, es necesario estudiar más a fondo la problemática y abordarla de forma distinta para entender mejor sus causas.
“En los últimos 30 años, las adolescentes latinas han tenido altas tasas de síntomas depresivos, ideas suicidas e intentos de suicidio”, dijo De Luca, quien cree que la disparidad que refleja este grupo étnico puede originarse por factores particulares.
“Generalmente, las minorías raciales o étnicas son menos propensas a buscar ayuda. Hay una tendencia a pensar que es solo su problema, que tienen que lidiar ellos solos con la situación o que es un problema familiar y por ello debe resolverse en privado”, explicó.
La investigadora asegura que resta mucho por hacer para lograr que los programas públicos disponibles incluyan las necesidades de cada grupo y, por ende, sean más efectivos.
“No pueden ser como un molde de galletas para todas, debe haber más programas que respondan a las diferentes necesidades”, dijo.
De acuerdo con cifras de los Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC), el 15 % de las adolescentes latinas ha intentado suicidarse, comparado con el 9.8 % entre las jóvenes blancas, el 10.2 % entre las afroamericanas y el 8.6 % en las adolescentes en general.