Más de 10 millones viven con indocumentados

EFEUSA

Más de 10 millones de estadounidenses o residentes legales, de los cuales 5,9 millones son niños, conviven con al menos un indocumentado, según un reporte que, en este sentido, realza la magnitud del impacto de las medidas migratorias que buscan la deportación de inmigrantes irregulares.

“Millones de personas, ciudadanas o no, viven en familias de estatus mixto con al menos un miembro de la familia (inmigrante) no autorizado en el mismo hogar”, dijo Silva Mathema analista de Políticas de Inmigración del Center for American Progress (CAP), que hizo el estudio junto con la Universidad del Sur de California (USC).

La investigadora y autora principal del reporte consideró “indudable” que no hay forma de separar a los inmigrantes de la gente nacida en Estados Unidos. “No puede ser nosotros contra ellos”, agregó.

El análisis “Manteniendo juntas las familias: Por qué todos los estadounidenses deberían poner cuidado a lo que pasa con los inmigrantes no autorizados” encontró que más de 8 millones de estadounidenses, de los cuales 5,9 son menores y 1,2 millones son ciudadanos naturalizados, conviven con al menos un indocumentado.

A ese número hay que agregarle los cerca de 2,5 millones de residentes, aunque otros 5,9 millones de personas, en este caso indocumentados, viven con otras que carecen de estatus legal, para un total de 16,7 millones de habitantes.

Todas ellos se verían afectados directamente con las medidas migratorias del presidente Donald Trump, que pretende deportar a un buen número de los once millones de indocumentados que se calcula viven en el país.

Para ello, el republicano aprobó medidas ejecutivas con el objetivo de acelerar las expulsiones y ampliar la base de indocumentados susceptibles de ser deportados bajo la premisa de que inicialmente solo se repatriaría a personas que supongan una amenaza para la seguridad nacional.

Sin embargo, las operaciones del Servicio de Inmigración y Aduanas (ICE) han sido más amplias y han llegado a detener a inmigrantes sin antecedentes criminales que estaban acompañados de indocumentados con orden de deportación a los que buscaban los agentes.

El estudio de CAP y USC indica que California, con una población total de 38,3 millones de habitantes, es el estado del país con mayor porcentaje y mayor número de personas que viven con al menos un indocumentado.

El Estado Dorado tiene más de 4,6 millones de ciudadanos en esa circunstancia (el 12 % de la población), de los cuales casi 2 millones son menores de edad.

Texas es el segundo estado del país tanto en porcentaje (10 %) como en número de ciudadanos que viven con un indocumentado, con un total de 2,6 millones estadounidenses en esa situación, de los cuales más de 1,2 millones son menores.

Según destacó Mathema, “en estados como Wyoming, Dakota del Sur y Arizona más de o cerca del 50 % de la población infantil vive con miembros de la familia no autorizados”.

Nevada es el tercer estado del país según el porcentaje de estadounidenses que viven con al menos un indocumentado en su hogar, con más de 254.000 personas en esa condición (9 % del total de la población), de los cuales más de 112.000 son menores de edad.

No obstante, en número total de personas de Nueva York ocupa el tercer lugar con más de 1,2 millones de ciudadanos que conviven con al menos un indocumentado.

“La difusión de estados en este análisis muestra que el efecto de una política antiinmigración no solamente se limita a los grandes estados como California y Nueva York”, indicó la investigadora.

“Más bien, el efecto es más expansivo y afectará a estados más pequeños aunque no tengan una alta población inmigrante”, agregó Mathema.

Al argumentar que las medidas de control de la inmigración indocumentada afectan también y especialmente a los menores de edad, la investigadora destacó el caso de Carolina del Norte.

En ese estado, el 91 % (unas 169.700) de las personas que viven con un inmigrante no autorizado son niños, el porcentaje más alto del país.

“Estos estimados son conservadores por naturaleza, conservadores ya que no incluyen el número de miembros de familia que no residen en la misma vivienda”, apunta el análisis, que se basa en datos de la Encuesta de Comunidad Estadounidense 2010-2014.