En el limbo la ID municipal en Jersey City
En Jersey City parecen haberse apagado los fuegos de apoyo al inmigrante: el ID municipal aún no tiene fecha de discusión; es más se portergó por segunda vez su aprobación.
El 12 de abril pasado la propuesta de establecer el ID tomó una primera votación en el Concilio Municipal de la ciudad. El resultado fue 7-0 a favor del documento.
La aprobación de la ordenanza debió ser sometida a una segunda votación el 24 de mayo pero en la oficina del presidente del Concilio, Rolando Lavarro, un concejal que destaca por ser defensor de los inmigrantes, dijeron que no habrá votación el día fijado.
“La votación no será ésta semana, es posible que sea la semana siguiente. No conozco el motivo, dijo la secretaria del concilio Marlene Sandkamp.
La siguiente sesión municipal ha sido calendarizada para el 14 de junio, de acuerdo a las fechas publicadas en el portal de esa localidad: www.cityofjerseycity.com
En la primera postergación del voto el presidente del Concilio atribuyó la demora para prevenir problemas legales, con un manejo cuidadoso del lenguaje.
“Sólo hay algunas cuestiones sobre el lenguaje de la ordenanza que queremos asegurarnos de que lo hagamos bien”, dijo Lavarro, en la reunión de consejo del 26 de abril, de acuerdo al Jersey Journal “Ustedes probablemente podrían entender que el lenguaje legal importa En estas situaciones particularmente con el ambiente federal hoy”.
Al cierre de ésta edición el concejal Daniel Rivera, el único hispano en el conclio, no retornó las llamadas al respecto.
Esta indecisión, sin embargo, no significa un paso atrás en la actitud de la ciudad frente a sus inmigrantes.
El 3 de abril pasado la ciudad de Jersey City se declaró “Ciudad Santuario” , en consecuencia las agencias y policía de la ciudad, no están obligadas a compartir información de los residentes locales con ICE ni compartir recursos policiales para capturar inmigrantes. Salvo una orden judicial expresa.
La orden ejecutiva E.O. 2017-003 es de carácter mandatorio para los trabajadores y funcionarios de la ciudad y, sobre todo, en el artículo segundo, sección E, ordena no permitir el ingreso de oficiales federales a las oficinas y facilidades para efectuar arrestos, incluyendo el acceso a la data o información de los residentes locales.
Esto tiende un manto de protección para el ID municipal, pues las mayores observaciones y temores sobre el documento descansan en la posibilidad que la data sea compartida con oficinas federales.
Todo esto, pese a que en los primeros días de la Administración Trump, se anunció que le retirarían fondos federales a las ciudades que se consideren santuarios y no colaboren con las autoridades federlaes de inmigración.