Las escuelas deben abrir tomando medidas de prevención y comprensión
Kleibéel Marcano / Reporte Hispano
Al sopesarse los pros y los contra de reabrir las escuelas al sistema presencial, varios expertos durante una teleconferencia organizada por Ethnic Media Services (ETM) coincidieron que los beneficios son mayores que los riesgos existentes de contagios. No obstante, aclaran que deben tomarse medidas para garantizar la seguridad del personal de las escuelas, así como el bienestar social y emocional de los estudiantes.
Louis Freedberg, Director Ejecutivo de EdSource, calificó a la reapertura de las escuelas como “el tema mas contencioso actualmente” relacionado con la pandemia del COVID-19 en el país, ante el rechazo de decenas de sindicatos de maestros de que sus miembros vuelvan a las aulas por considerar que esto incrementaría el riesgo de contagio. La batalla legal entre los sindicatos de maestros y las autoridades de ciudades como Chicago y San Francisco, son algunos de los ejemplos de lo polémico del tema.
Freedberg explica que diferentes estudios demuestran que los niños deberían regresar al salón de clases. “Los niños se infectan con menos frecuencia que los adultos, especialmente los estudiantes del nivel de escuela elemental, y los contagios usualmente provienen de adultos en sus familias y no de otros estudiantes”.
En su opinión, los distritos escolares deben tomar medidas de precaución, como uso de máscaras, distanciamiento social, pequeños grupos, ventilación y pruebas frecuentes. De igual modo, debe tomarse en cuenta el nivel de infección dentro de las comunidades antes de decidir la apertura de las escuela.
El único motivo que mantiene las escuelas cerradas es el riesgo de contagio que asumirían los maestros, el personal de las escuelas y los adultos en las familias de los estudiantes, quienes no tiene la misma protección que los niños.
Actualmente la pandemia se encuentra en alto niveles en contagios y muertes, especialmente entre los grupos minoritarios. Esto mantiene a muchas personas en cautela, definiendo si es el mejor momento o no para reabrir.
Aunque los maestros están exigiendo ser vacunados contra el COVID-19 antes de reabrir las escuelas, los CDC consideran que la vacuna no es un requisito indispensable para la reapertura.
Impacto negativo del aprendizaje a distancia
Diferentes estudios demuestran que el aprendizaje a distancia a tenido un impacto negativo, en general, en los estudiantes. “Más niños están experimentando depresión, ansiedad, estrés post traumático, y esto se debe no sólo a causa del aislamiento con otro niños, sino también al ver a sus padres enfrentando dificultades y estrés económico por las pérdidas de trabajo e ingresos”, señaló Freedberg.
En este sentido, el profesor de Educación de UCLA, Tyrone Howard, dijo que es esencial que las escuelas tomen en cuenta el bienestar social y emocional de los estudiantes al momento de reabrir las escuelas.
Destaca que la pandemia ha generado en un alto porcentaje de estudiantes problemas mentales, como altos niveles de depresión y ansiedad, por la muerte de familiares a causa del virus o la pérdida de ingresos económicos en sus hogares, que los debilitan para cumplir con el trabajo escolar y afecta su comportamiento. “Es importante que las escuelas provean recursos, como consejeros, asesores, psicólogos, para lidiar con esta situación”, afirma Howard.
De lo contrario, estos niños a quienes la pandemia les ha cambiado su comportamientos terminarán siendo disciplinados, suspendidos o aislados en las escuelas. “No podemos permitir que la respuesta al dolor de esto niños sean castigos adicionales en las escuelas”, resaltó el profesor.
Los niños de los grupos minoritarios, como los hispanos y afroamericanos, son los que tienen más necesidades de ayuda y apoyo emocional en las escuelas, ya que sus familias han sido más afectadas por la pandemia. “Es importante que se desestigmatice la importancia de la salud mental en las comunidades minoritarias. A los niños se les cría en un ambiente donde se les enseña que no es bueno decir que no están bien. Esto debe cambiar”, destacó.
A causa de la pandemia también se ha reportado una disminución en el rendimiento académico y la participación en clase. “La pérdida de aprendizaje será masiva, especialmente en las comunidades minoritarias”, señala el profesor. En este sentido, considera que al concluir la pandemia es necesario que en todo el país se establezcan “clases obligadas en el verano, programas de enriquecimiento académico y tutorías adicionales, especialmente para los niños mas necesitados”.
De igual modo, con la pandemia ha crecido la inseguridad alimentaria en miles de niños de familias de escasos recursos que dependen de las comidas ofrecidas por las escuelas para alimentar a sus hijos.