Condenas de 2 años y un año y medio por caso Bridgegate
Dos ex ayudantes del gobernador de Nueva Jersey, Chris Christie, fueron sentenciados a 2 y 1,5 años de prisión por su participación en el caso “Bridgegate”, una conspiración que llevó al cierre en 2013 de dos carriles del puente George Washington a modo de represalia política.
Bill Baroni fue condenado por la juez Susan Wigenton a dos años de prisión, a un año de libertad vigilada y a 500 horas de servicio comunitario, mientras que la otra acusada, Bridget Kelly, fue sentenciada a 18 meses de cárcel, un año de libertad condicional y otras 500 horas de servicio comunitario.
La condena se produce casi 5 meses después de ser considerados culpables por un jurado de 7 cargos, entre ellos conspiración, fraude, mal uso de infraestructuras públicas y violación de los derechos civiles de los ciudadanos.
Baroni y Kelly fueron procesados por el cierre repentino, en septiembre de 2013, de dos carriles del puente George Washington, que une Fort Lee con el Alto Manhattan (Nueva York), lo que creó una gran congestión del tránsito rodado en el lado de Nueva Jersey durante cuatro días.
Más tarde se supo que el cierre parcial del puente se produjo como represalia política contra el alcalde de Fort Lee, el demócrata Mark Sokolich, por no haber apoyado al gobernador Christie en su campaña para la reelección.
Kelly, que fue jefa adjunta del gabinete de Christie, fue quien envió a varios miembros del equipo del gobernador un correo electrónico que desencadenó el esquema con el mensaje de “es tiempo para algunos problemas de tráfico”.
Por su parte, Baroni ocupaba un puesto ejecutivo en la Autoridad Portuaria e ignoró durante mucho tiempo los mensajes del alcalde de Fort Lee sobre el problema de seguridad que causaba la congestión de tránsito para autobuses escolares, vehículos de emergencias y el resto de los usuarios del puente.
El escándalo puso en el ojo del huracán a Christie, que tenía aspiraciones presidenciales.
El gobernador negó en todo momento haber estado al corriente de los hechos, pese a que en ellos estaban involucrados varias personas de su círculo más cercano.
“Bridgegate” llevó además a que el entonces presidente de la Autoridad Portuaria de Nueva York y Nueva Jersey (PANYNJ), David Samson, cuyo papel también había sido cuestionado, dimitiera a su cargo en 2014.