Hispanos viven con preocupación el Día Mundial del Asma
Los hispanos, que sufren asma de manera desproporcionada, vivieron con preocupación el Día Mundial de esta enfermedad debido a las medidas tomadas por el presidente, Donald Trump, para acabar con el legado medioambiental de su predecesor, Barack Obama.
“Obama hizo mucho para mejorar la calidad del aire, pero a este Gobierno parece que no le importa”, dijo la doctora Elena Ríos, presidenta de la Asociación Médica Nacional Hispana (NHMA, por su sigla en inglés), organización dedicada a velar por la salud de la comunidad latina.
Ríos destacó la importancia que tiene este tema para la comunidad hispana, que sufre de manera desproporcionada los efectos de la contaminación ambiental y el cambio climático.
“El asma crece entre los latinos porque muchos viven en grandes ciudades, cerca de las autopistas, con los grandes camiones, cerca de las plantas eléctricas. El asma está creciendo y tenemos niños en las escuelas que no pueden ir al colegio y aprender porque están enfermos”, relató Ríos.
“Hay -añadió- madres que están muy preocupadas por sus familias y por sus niños, que no saben si sobrevivirán. El asma puede matar niños pequeños. Y luego hay otra gente que trabaja en fábricas con químicos y otros que están en granjas, trabajando con pesticidas que pueden amenazar su salud”.
Por todo ello, el asma preocupa especialmente a la minoría hispana, que cuenta entre sus miembros a 2,2 millones de personas con esta enfermedad, según datos de 2015 de la Oficina de Salud para las Minorías del Departamento de Salud.
Asimismo, según datos de esta oficina, los hispanos son un 50% más propensos a acudir a una sala de emergencia debido a problemas asmáticos y respiratorios que las personas blancas no hispanas.
Los niños latinos, además, tienen el doble de probabilidad de morir de asma en comparación con sus compañeros blancos no hispanos, según la Oficina de Salud para las Minorías.
La alta incidencia del asma entre los hispanos está ligada a las condiciones económicas, pues los niños que viven por debajo o cerca del nivel de pobreza tienen mayor riesgo de tener en sangre altos niveles de cotinina (una sustancia derivada de la nicotina) que sus pares en familias de mayores ingresos.
De hecho, los niños expuestos al humo del tabaco de manera indirecta tienen un mayor riesgo de sufrir infecciones agudas de las vías respiratorias bajas, como la bronquitis.
El Día Mundial del Asma está organizado por la Iniciativa Global para el Asma (GINA por sus siglas en inglés), un grupo creado en 1993 en colaboración con la Organización Mundial de la Salud (OMS) para promover la investigación del asma e investigar cómo puede estar ligada con las condiciones climáticas.
Al ser preguntada sobre el futuro, la doctora Ríos afirmó que el problema del asma seguirá creciendo debido a las políticas que ha adoptado Trump para desmantelar importantes iniciativas de Obama contra la contaminación ambiental, como el Plan de Energía Limpia. Ese plan, lanzado en 2015, tenía como meta reducir para 2030 en un 32 % las emisiones de carbono de las centrales eléctricas con respecto a los niveles de 2005.
Trump ha subrayado en varias ocasiones que dará prioridad al crecimiento económico frente a las preocupaciones de los grupos ecologistas. Precisamente el fin de semana pasado, la Agencia de Protección Medioambiental (EPA) suprimió de su web la información referente al cambio climático para reflejar “la perspectiva del nuevo Gobierno”.
El director de la EPA designado por Trump, Scott Pruitt, ha reiterado en diversas ocasiones su escepticismo sobre la evidencia científica tras el calentamiento global.
El nuevo Gobierno está actualmente sopesando si permanece o se sale del Acuerdo de París sobre el cambio climático, que busca cambiar el modelo de desarrollo del planeta hacia uno libre de combustibles fósiles.