Avanza proyecto de ley que prohíbe el requisito de la prueba de graduación de la escuela secundaria
Por Sophie Nieto Muñoz / www.newjerseymonitor.com
Un proyecto de ley para derogar un mandato estatal de que los estudiantes de 11º grado en Nueva Jersey aprueben una prueba de competencia estatal para graduarse de la escuela secundaria recibió la aprobación de los legisladores.
Los críticos del examen final argumentan que la investigación muestra que las pruebas estandarizadas no son una forma precisa de medir el conocimiento de un estudiante. Señalan estudios que muestran que las pruebas finales para la graduación no son un buen indicador de qué tan preparado está un estudiante para la universidad, y afirman que las pruebas perjudican injustamente a los estudiantes de color y a los niños de familias de bajos ingresos.
“Estoy de acuerdo en que necesitamos algún tipo de medida, pero nosotros, como cuerpo legislativo, como estado, como administradores y representantes, debemos asegurarnos de que esta medida realmente nos diga la calidad del programa educativo que el estudiante está recibiendo, no que tan ricos o pobres son o de dónde vienen”, dijo Jamil Maroun, superintendente de escuelas de Manville.
El comité de Desarrollo y Asuntos Comunitarios de la Asamblea avanzó el proyecto de ley por unanimidad, y ahora se dirige a la cámara en pleno para su votación. Un proyecto de ley idéntico en el Senado espera una audiencia del comité.
En la reunión del comité de la Asamblea, los administradores escolares y los defensores de la educación se preguntaron por qué las escuelas aún deben administrar la prueba a medida que más estados eliminan el requisito, y que Nueva Jersey no ha realizado el examen desde 2019.
Nueva Jersey ha requerido que los estudiantes aprueben un examen estandarizado para graduarse de la escuela secundaria desde 1980, y es uno de los pocos estados que todavía lo requieren. Nueva Jersey suspendió el examen en 2020 y 2021 debido a la pandemia, y el año pasado los jóvenes tomaron el examen pero no tenían que aprobarlo para graduarse ese año.
Si los estudiantes no lo aprueban, aún pueden graduarse enviando un portafolio con su promedio de calificaciones y los resultados de otra prueba de calificación, como el PSAT.
Los funcionarios de educación testificaron que los estudiantes que aprobaron otra prueba pueden no esforzarse por aprobar el examen de competencia, lo que genera horas de tiempo educativo perdido en el salón de clases. Mientras tanto, los estudiantes que no aprobarán el examen todavía se ven obligados a sentarse durante horas para tomarlo solo para reprobar, dijeron.
Krista Whitaker habló de sus dos hijos, quienes tienen programas de educación individualizados. Whitaker dijo que su hijo mayor se destaca en las pruebas regulares del aula cuando se le brindan modificaciones como tiempo adicional y orientación verbal, pero esa ayuda no está permitida para el examen de competencia de la escuela secundaria, lo que lo obliga a tomar una prueba que no entiende y no puede aprobar.
“En este momento, mi hijo no puede graduarse el próximo año”, comentó Whitaker.
De acuerdo con el Centro Nacional para Pruebas Justas y Abiertas, los estudiantes de comunidades de color reprueban desproporcionadamente los exámenes de graduación de la escuela secundaria, creando obstáculos para los estudiantes que buscan becas o excluyéndolos por completo de las admisiones universitarias, lo que contribuye a la brecha racial en las tasas de graduación de la escuela secundaria y la inscripción universitaria.
Quienes se oponen a la medida resalta que la prueba es aún más importante por causa de las interrupciones escolares durante la pandemia. Althea Ford, de la Asociación de Industria y Negocios de Nueva Jersey, afirmó que la prueba proporciona datos para “evaluar el impacto que la pandemia está teniendo en nuestras escuelas y niños”.
Ford considera que reducir los requisitos de las pruebas podría conducir a una merma de la fuerza laboral en el futuro debido a los estándares más bajos para graduarse. La clasificación constantemente alta del estado en educación es lo que atrae a las empresas al Estado Jardín, aseguró.
Paula White, directora ejecutiva del grupo de defensa de la educación JerseyCAN, también enfatizó cómo las pruebas ofrecen una forma estandarizada de medir la competencia en el grado 11. Sería un “perjuicio” para los estudiantes desatendidos eliminar un punto de comparación que hace que los distritos escolares y los maestros rindan cuentas, dijo.
“La información no es una crítica… tenemos que dejar de enterrar la cabeza en la arena con respecto a la información que simplemente no queremos saber”, argumentó.