Analizan acciones legales contra antiinmigrante

Luego de que un residente en Morristown, en el condado de Morris, colocara carteles despectivos y acusatorios contra la comunidad hispana de esta localidad, en especial contra la amplia comunidad colombiana, la Asociación Nacional para el Avance de la Gente de Color (NAACP, por sus siglas en inglés) capítulo Nueva Jersey, ha iniciado una investigación para determinar posibles acciones legales contra Gregg Bruen e hicieron un llamado a las autoridades a prestar asistencia de salud mental para esta persona para evitar problemas mayores.

El pasado martes 15 de septiembre Bruen colocó sendos carteles en el jardín al frente de su casa acusando a la comunidad hispana del incremento de la inseguridad en el vecindario, el aumento de los impuestos por “culpa de los indocumentados que no pagan impuestos”, crear condiciones peligrosas para el vecindario por el hacinamiento en la viviendas, entre otros problemas.

Bruen fue más allá al acusar a la amplia comunidad de colombianos que residente en Morristown de apoyar a los carteles de la droga.

Esta situación generó un tremendo malestar y llevó a decenas de latinos a protestar el pasado miércoles frente a la casa de Bruen, en la Speedwell Avenue, por lo que consideran una actitud racista y xenófoba del estadounidense.

Edward Correa, miembro del Comité de Asuntos Legales de la NAACP, señala que luego de conversar por más de una hora con Bruen pudieron deducir que esta persona requiere de servicios de salud mental.

“Nosotros condenamos sus críticas injustificadas a la comunidad latina y que caracterice a una comunidad de un país de una manera negativa. Pero lo más importante ahora es que esta persona reciba ayuda para evitar un problema mayor”, señaló Correa.

El activista explicó que Bruen presenta las características de otros individuos que han cometido tragedias en otras partes del país, y por ende se requiere de la intervención de la autoridades.

Por otra parte, Correa señaló que la NAACP actualmente investiga las acciones de Bruen en los últimos meses y no descartan demandarlo por hostigamiento a sus vecinos.

“Hasta lo que hemos averiguado, este señor reiterativamente acusa a sus vecinos hispanos ante la policía, control de animales e inspectores de vivienda sin causa probable, esto puede ser considerado como acoso”, afirmó Correa.

El alcalde de la ciudad, Tim Dougherty, señaló a los medios de comunicación que lamentaba la actitud de Bruen, a las que calificó de vergonzosas e hiriente, pero dijo que no podían hacer nada ya que las personas tienen derecho a la libre expresión.

Varios de los manifestantes frente a la casa de Bruen opinaron que la actitud de este señor responde al discurso antiinmigrante del candidato Donald Trump, el cual ha envalentonado a personas racistas a sentirse con derecho de atacar a los inmigrantes.