Abuso de antibióticos promueve bacterias

Los especialistas en enfermedades infecciosas advierten que los brotes de “superbacterias”, como el ocurrido hace unos días en el Centro Médico Ronald Reagan de UCLA, están asociados al abuso y mala utilización de antibióticos, según señalaron.

“Las superbacterias han surgido debido al uso excesivo de antibióticos, lo que ha resultado en bacterias que la mayor parte de antibióticos no pueden matar”, dijo Diana Zuckerman, presidenta del Centro Nacional para la Investigación Sanitaria, una organización de investigación y educación en materia de sanidad.



Tal como advierten los expertos, y en contra de la creencia popular, los antibióticos no sirven para tratar cualquier infección, sino que sólo son eficaces para combatir enfermedades causadas por las bacterias.



“Dejen de usar antibióticos para el catarro y la gripe, que están causados por virus, no por bacterias”, recomendó la experta, quien puso de relieve que, a su juicio, “cada vez que un antibiótico es aprobado por la FDA (Administración de Medicamentos y Alimentos de EEUU), los doctores tienden a prescribirla cuando no es necesaria”.



La llegada al mercado de antibióticos más potentes ha hecho que las bacterias se adapten al entorno y cobren más fuerza, ante lo cual la Organización Mundial de la Salud (OMS) alertó en abril de 2014 que la resistencia a los antibióticos por parte de las bacterias “es ya una amenaza a la salud pública”.



El doctor Keiji Fukuda, director general adjunto de Seguridad Sanitaria de la OMS, advertía que “el mundo se dirige hacia una era posantibiótico, donde infecciones comunes y heridas leves que durante décadas eran tratables pueden ser de nuevo letales”.



El brote ocurrido en UCLA, que se cobró la vida de dos personas y dejó a más de 100 expuestas a una resistente bacteria, está vinculado también a las dificultades que presentan instrumentos médicos como los endoscopios para ser esterilizados y para eliminar de éstos las bacterias y los virus.



Según advierte Zuckerman, “la FDA ni siquiera requiere que se compruebe la seguridad o efectividad” de más del 95% de la instrumentación médica que se encuentra en el mercado y en hospitales de todo el país.



“Sólo tienen que demostrar que son “sustancialmente equivalentes” a otro instrumento que ya está en el mercado, “pero puede que la seguridad y eficacia de ese otro instrumento tampoco haya sido comprobada”, matizó la especialista.



Zuckerman recordó además que también contribuye a la resistencia de las bacterias el uso de antibióticos en animales que posteriormente acaban en boca del consumidor. 


La semana pasada dos personas murieron en un hospital de Los Ángeles tras infectarse con endoscopios contaminados con una peligrosa y resistente bacteria a la que podrían haber estado expuestos unos 180 pacientes.

El brote en el Ronald Reagan UCLA Medical Center de Los Ángeles es el último en una serie de casos similares ocurridos desde 2012 en hospitales de Pensilvania, Illinois y el estado de Washington.

Al menos otros cinco pacientes del centro están infectados con la bacteria conocida como “CRE”, resistente a los antibióticos y con una alta mortalidad.