Alex Rodriguez confesó consumo de esteroides

El pelotero de origen dominicano Alex Rodríguez podría haber confesado ante representantes de la Agencia Antidrogas de Estados Unidos (DEA) el consumo de esteroides y sustancias prohibidas, de acuerdo a la información que publicó el periódico Miami Herald.



En la misma información se señala que Rodríguez, de 39 años, que volverá a jugar esta temporada con los Yanquis de Nueva York tras perderse toda la pasada por la sanción que le impuso la oficina del comisionado del béisbol, recibió “inmunidad” antes de hablar con los agentes federales y fiscales.



Siempre de acuerdo a la misma fuente periodística que dice haber tenido acceso a los documentos oficiales que están en poder del gobierno, la entrevista de los agentes de la DEA con Rodríguez se dio el pasado 29 de enero.



Varios implicados en el caso de la clínica Biogenesis de Miami, han manifestado a través de sus abogados de la existencia de la conversación de Rodríguez con los agentes federales, pero el portavoz del pelotero mejor pagado del béisbol profesional, Ron Berkowitz, no ha hecho ningún comentario al respecto.



La pasada semana, Berkowitz comentó que su cliente “hablará cuando sea el momento, ahora no lo es y que nadie dude que lo hará y se conocerá lo que diga”.



Rodríguez ha centrado toda su actividad en la preparación para volver a la competición activa y completar los tres años de contrato y 60 millones de dólares que aun le quedan con los Yanquis.



El toletero de origen dominicano también se vio involucrado en otros documentos presentados ante la corte por fiscales federales que consideran que pagó a su primo Yuri Sucart para que guardase silencio con relación al presunto consumo de esteroides y la implicación que tuvo con la clínica Biogénesis de Miami.



La investigación sobre la ya desaparecida clínica, propiedad de Anthony Boch, que colabora con las autoridades llevó a las Grandes Ligas a suspender a 14 peloteros por estar implicados en el presunto consumo de sustancias dopantes que favorecían el rendimiento en el campo.

Entre ellos se encontró Rodríguez que fue el que mayor castigo recibió, aunque el pelotero ha negado permanente que hubiera consumido esteroides, que se trataba de una “caza de brujas”, que era un “chivo expiatorio” del comisionado de las Grandes Ligas, Bud Selig, y recordó que nunca dio positivo en los exámenes antidopaje a que fue sometido.



Rodríguez, que recibió el mayor castigo que se ha dado a un pelotero en la historia del béisbol, llevó a los tribunales a Selig, pero después que un mediador independiente decidiese mantener un año de suspensión, el tercera base de los Yanquis retiró todas las demandas y no siguió con el proceso legal.



Las Grandes Ligas suspendieron inicialmente a Rodríguez con 211 partidos por “el uso y posesión durante los últimos años de numerosas formas de sustancias prohibidas que elevan el rendimiento, incluyendo testosterona y hormona de crecimiento humano”.



Rodríguez confesó en 2009 haberse dopado de 2001 a 2003, cuando no estaba castigado el uso de sustancias prohibidas en las Grandes y Ligas y jugaba con los Vigilantes de Texas, pero desde entonces afirmó estar “limpio”.



Ahora el objetivo de Rodríguez es volver en plenitud de forma y conseguir alcanzar la marca de los 660 jonrones del legendario Willie Mays, para la que sólo le faltan seis cuadrangulares, que lo dejaría cuarto en la lista de todos los tiempos.