Activistas respaldan decisión del Desfile Puertorriqueño
Ruth E. Hernández Beltrán / EFEUSA
Diversos grupos comunitarios en Nueva York y la presidenta del concejo municipal, Melisa Mark Viverito, apoyaron al Desfile Nacional Puertorriqueño y su decisión de rendir tributo al independentista Oscar López Rivera, lo que ha causado controversia en la ciudad.
“Oscar López, el Mandela boricua”, “Oscar sí, la Junta no”, gritaba un nutrido grupo de puertorriqueños que celebraba que el presidente Barack Obama conmutara su sentencia el pasado enero, tras cumplir 35 años de prisión, los últimos doce en confinamiento en solidario.
El mensaje de más de un treintena de grupos fue de unidad, de dejar claro que “35 años son suficientes” y que López Rivera, a quien el desfile del 11 de junio reconocerá como “Prócer de la Libertad” no tuvo nada que ver con los atentados con bomba a los que algunos le han vinculado.
Los más de 100 atentados cometidos en Puerto Rico y EE.UU., en que cinco personas perdieron la vida, fueron atribuidos a las Fuerzas Armadas de Liberación Nacional (FALN), grupo clandestino que luchaba por la independencia de Puerto Rico, al que perteneció.
López Rivera fue sentenciado a 55 años de cárcel en 1981 por conspiración sediciosa y otros cargos tras ser vinculado con las FALN y en 1986 se le agregaron otros 15 años por un presunto intento de fuga, pero no se le acusó por la muerte de nadie.
En 1999 el presidente Bill Clinton le ofreció clemencia que no aceptó porque no incluía a otros dos presos de las FALN.
Algunos destacaron en la conferencia que si Puerto Rico no fuera “una colonia de EE.UU.” Oscar no habría estado preso por 35 años. Insistieron además en la necesidad de apoyar a Puerto Rico ante la crisis económica que afecta a la isla, lo que aseguraron es resultado también de la relación política con este país.
“El llamado aquí es al pueblo para que salga a la calle, que asista al desfile. Para nosotros, él es un héroe”, dijo Mili Bonilla, del grupo 35 Mujeres por Oscar, uno de los varios grupos de apoyo al desfile.
Agregó que a George Washington, al igual que a López Rivera, también le llamaron terrorista por luchar por la independencia de lo que es hoy EE.UU., y que luego fue su presidente.
Recordaron que Oscar López no es la única figura a quien se rendirá tributo y que el desfile, tal y como indica su lema de este año, “un pueblo, muchas voces”, da espacio a la diversidad de pensamientos que hay en la comunidad puertorriqueña.
“Este desfile no es sólo de Oscar. También tiene que ver con las contribuciones que hemos hecho a Nueva York y al país por muchas décadas”, indicó Mark Viverito durante la candente conferencia en que varios medios insistieron en cuestionar la relación del independentista con los atentados de las FALN.
La empresa de productos alimentarios Goya, contra la que algunos llamaron hoy a un boicot, y las organizaciones de policías Hispanic Society y el sindicato policial Patrolmen’s Benevolent Association anunciaron que no estarán presentes.
El músico neoyorquino Wille Colón, de origen puertorriqueño, se ha unido a las voces que critican la decisión del desfile, asegurando que el evento “se les ha ido de las manos” a las de un grupo de “fanáticos radicales”.
Por su parte, el presidente de la Comisión de Gobierno de la Cámara de Representantes, Jorge Navarro, dijo que la Fiscalía de Nueva York debería intervenir con el Desfile Nacional Puertorriqueño y solicitarle la renuncia a su presidenta, Lorraine Cortés Vázquez y todo el componente de su Junta de Directores, a raíz del giro que ha tomado el mismo.
El representante por el Precinto 5 de San Juan, Guaynabo y Aguas Buenas, lamentó en un comunicado, la cancelación del auspicio los New York Yankees, Goya Food, de la línea aérea Jet Blue, de las organizaciones que agrupan la policía de Nueva York, el Departamento de Corrección, los Bomberos y otros.
En este sentido, explicó que eso “ya se venía cuajando a raíz del anuncio de incluir a un ‘terrorista’ como figura principal en el desfile del próximo domingo, 11 de junio, lo que pone en serio riesgo terrorista a la parada en la quinta avenida”.
“Nosotros no tenemos ningún problema en reconocer que ya era hora de liberar al convicto Oscar López Rivera, tras sus 35 años en prisión. Eso lo estipulamos y creemos que fue un acto humanitario su excarcelación por parte del presidente Barack Obama”, dijo.
Sin embargo, añadió, “el giro que han tomado sus pocos días de libertad, nos obligan a pensar que la decisión de la Junta de Directores del Desfile Nacional Puertorriqueño en declarar ‘Héroe Nacional, Héroe de la Libertad’ a un fiel creyente de la lucha política armada es un error, que confunde a todos y crea una situación insostenible”. “Más aún, el ubicar como figura central en la Parada Puertorriqueña a un miembro del FALN menoscaba la importancia y el mensaje del evento cultural hispano más grande de la nación americana, que precisamente celebra su 60 aniversario este año”, señaló Navarro.