Advierten sobre un nuevo fraude telefónico

El Departamento de Estado advirtió sobre el “wangiri”, un fraude telefónico procedente de Japón en el que se intenta obtener información de quien contesta la llamada o mantener a la persona en línea para cobrar cargos internacionales, que resultan en importantes sumas.

Esta estafa comenzó el año pasado en Japón, se ha extendido despacio hasta Estados Unidos y lo que la caracteriza es que el teléfono sólo timbra una vez desde un número internacional, según un comunicado de la División de Protección al Consumidor.

Las llamadas están relacionadas en su mayoría con premios de la lotería, intentos de cobrar una deuda de la tarjeta de crédito o incluso ofertas de servicios sexuales.

Las autoridades señalan que cuando la persona devuelve la llamada a dicho número, los timadores intentan obtener sus datos y mantenerle el mayor tiempo posible en la línea porque el dinero que se cargará por ese llamada internacional lo cobrarán ellos.

Alertan de que bloquear las llamadas no funciona, porque quienes llaman cambian el número o redirigen ese número de la llamada fraudulenta a uno que le sea familiar a la persona para evitar ser bloqueados.

La agencia pidió al público no devolver la llamada porque eso puede llevar a que se repita el incidente y reciban cargos internacionales, además de exponerse a que intenten obtener sus datos.

También puede resultar en que les conecten a servicios que cobran por las llamadas en el país donde se originó la primera, permitiéndoles así cobrar cargos internacionales.

Asimismo, las autoridades neoyorquinas instaron a que no dar ninguna información que se solicite relativa a cuentas de banco, tarjetas de crédito o el Seguro Social, a menos que el consumidor sepa con quién está tratando.

Recordaron que ni las agencias del Gobierno ni las compañías piden pagos a través de tarjetas de regalo, una forma que permite a los estafadores obtener dinero sin que se les pueda rastrear.Por último, el estado pidió a los neoyorquinos que si reciben una llamada de este tipo lo denuncien a la División de Asuntos al Consumidor.