Yesenia López, la guardiana de la hispanidad de NJ

Yesenia López quiso ser policía, activó en el movimiento sindical, fue enfermera y entrenadora de boxeo y aún no pierde las esperanzas de volver al ring, también se graduó en Justicia Criminal, pero en un momento encontró la razón de su vida en los archivos y los libros, es decir en rescatar y conservar la memoria de los que se fueron y ofrecer las vidas inventadas, también las verdaderas, de los libros.

Y llegó el adiós a las armas: se empeñó en estudiar bibliotecología, gracias a una mentora, Olga Jiménez de Wagenheims, que le abrió los ojos hacia su identidad puertorriqueña, e hizo una residencia en el Centro de Estudios Puertorriqueños de Hunter College of New York.

López ocupa ahora el asiento de la recordada Ingrid Betancourt como directora ejecutiva de la Sala Hispanoamericana, la biblioteca en español, de la Newark Public Library, que todos los años produce la más interesante celebración hispana del estado.

Además ella es la guardiana del archivo puertorriqueño del estado de New Jersey, que ha ampliado su propósito inicial a toda la comunidad latinoamericana: el New Jersey Hispanic Research and Information Center (NJHRIC, por sus siglas en inglés) of Newark Public Library.

Yesenia no es novata en su posición, desde el verano del año 2022, viene trabajando como archivista e investigadora en lo que en su momento se llamaba el Puerto Rican Community Archives de Newark Library, el ascenso le llegó por añadidura.

“Sintiendo que nuestra comunidad puertorriqueña son los primeros hispanos que llegaron a New Jersey, y muchos de ellos han fallecido, se han mudado, se creó el centro para rescatar, conservar y divulgar su historia; entonces también nos dimos cuenta que debíamos abarcar a toda la comunidad hispana y aquí estamos” dijo Yesenia

Nos condujo por las instalaciones del archivo y mostró algunas joyas de su registro, como el álbum fotográfico de José Hernández Álvarez, y la señora Blanca Álvarez, un dentista que llegó a Jersey City en 1931.

Yesenia López, directora del Centro de Investigación Hispano de New Jersey y de la Sala Hispanoamericana de Newark Library, organizadora del programa del mes de la hispanidad de su biblioteca, mostrando los primeros archivos de la comunidad puertorriqueña en el estado. 

En el centro se cree que los periódicos hispanos son el alma de la comunidad. Tiene la colección de La Tribuna, misma que se ha digitalizado. La última que han recibido es del periódico El Nuevo Coqui, que circuló durante 30 años, hasta que cerró el periódico. Tienen las puertas abiertas a los archivos de los periódicos que persisten en la publicación.

De las comunidades latinoamericanas en general, en la nueva etapa del archivo, se han recibido, y reciben, fotografías y documentos que se digitalizan. Además se graban historias orales de las diferentes comunidades. El primero de ellos fue uno centrado en el tema justicia, con podcast de testimonios y opiniones de líderes comunitarios del estado.

El proceso para donar o registrar materiales en el centro NJHRIC se inicia llamando a Hubert Ayala, al (973) 733-4791, quien se entrevista con las familias interesadas, los aconseja sobre los materiales a conservar, la manera que se deben entregar, etc. 

Luego estos materiales se pueden ver en digital.npl.org. Allí se pueden encontrar, por ejemplo, links a otras colecciones como las de Eliu Rivera, histórico líder de Puertorriqueños Asociados for Community Organization (PACO), fallecido en el 2017.

La Sala Hispanoamericana, dice Yesenia, tiene una de las más grandes colecciones de libros en español de cualquier biblioteca de New Jersey, con unos 35,000 volúmenes. 

Ahora vienen nuevos tiempos. El Dr. Lauren Wells, presidente de la Junta de Newark Public Library, anunció que se remodelará un piso entero, en un proceso de modernización de las instalaciones del centro y la biblioteca, que deberá empezar antes de fin de año.

Yesenia López, nacida en Camden Nj, de padres puertorriqueños, se observa que en el curso de su vida cada oficio o profesión que ejerció la abrazó porque algún episodio de su vida le ha tocado muy íntimamente. Se hizo sindicalista por el maltrato que le hicieron a su papá en el centro laboral, se volvió boxeadora porque le gustaba el ejercicio físico y se hizo bibliotecaria porque descubrió que así realizaba su ser como puertorriqueña y latina.